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El Ayuntamiento de Torrelavega ha recuperado la gestión del servicio de recogida de residuos urbanos, que desde este mes de octubre se lleva cabo a través de la empresa municipal del agua (Aguas Torrelavega), en cuya plantilla se integrarán los 23 trabajadores que se encargan de la retirada de basuras. Así, la recogida de residuos sólidos urbanos en la capital del Besaya inicia una nueva etapa de gestión municipalizada, ya que la empresa pública Aguas Torrelavega (Aguator) sustituirá a la concesionaria Geaser, asumiendo también a los 23 trabajadores del servicio. Este cambio en la recogida de basuras culmina el proceso administrativo de municipalización iniciado hace varios años tras el acuerdo unánime de la Corporación, y el objetivo es que no afecte a la prestación del servicio, ya que el personal y los medios son los mismos.
De hecho, según los cálculos del equipo de gobierno (PRC-PSOE), que a lo largo de la pasada legislatura estudiaron las distintas alternativas para la gestión del servicio, se espera que con el cambio de modelo el Ayuntamiento pueda ahorrar al mes unos 15.000 euros, lo que supone al año un ahorro de 180.000 euros para las arcas municipales. Además del cambio en el modelo de gestión, el efecto más inmediato del proceso es que los trabajadores de Geaser pasarán a formar parte de la plantilla municipal y se les aplicará el convenio como al resto de personal del Ayuntamiento, lo que supone la actualización de los salarios del personal.
En este sentido, trabajadores y Ayuntamiento acordaron hace unas semanas que tanto el incremento de 2018 como el de 2019 se circunscriban al aumento pactado por los empleados públicos para esos años y será de aplicación a partir del 1 de enero de 2020. A partir de esa fecha, el compromiso del Ayuntamiento es seguir actualizando los salarios de acuerdo a la Ley de Presupuestos. Las cuatro alternativas que se estudiaron en el seno de la comisión técnica suponen un gasto de 1.717.897 euros en el caso de una nueva licitación; 1.707.619 euros en el supuesto de crear una nueva empresa pública; 1.589.176 euros si el servicio fuese asumido directamente por personal municipal –opción que resultó descartada porque no garantiza la continuidad de los actuales puestos de trabajo– y la opción acordada por todos los grupos políticos, 1.585.767 euros, con la gestión por parte de Aguas Torrelavega.
El proceso para recuperar la gestión pública del servicio de recogida de basuras comenzó en febrero de 2018, cuando se aprobó en el pleno municipal la creación de una comisión técnica que estudiara las alternativas. Después de casi una decena de reuniones se alcanzó un acuerdo entre los grupos políticos y al tiempo se informó de cada paso a los comités de empresa de ambos servicios, así como a sus directivos y responsables.
El concejal delegado de Aguator, Pedro Pérez Noriega, aseguró, tras aprobarse hace unas semanas el acuerdo de integración laboral, que la estructura de trabajadores «garantiza» que el traspaso de gestión se realice «sin ningún tipo de problemas». A su juicio, se cumple así el «compromiso» del equipo de gobierno PRC-PSOE de municipalizar el servicio «sin afectar» a la recogida y sin que haya incremento del recibo a los torrelaveguenses, pues entiende que «la gestión pública será más eficiente y más económica». Por su parte, el alcalde, Javier López Estrada, recibió a los 23 trabajadores del servicio municipal de recogida de residuos, y destacó que «estamos muy orgullosos de que haya llegado este día, fruto del trabajo de toda una Corporación y del compromiso de todos nosotros con el trabajo de los empleados públicos», señaló.
El servicio de recogida y transporte de residuos sólidos urbanos de Torrelavega ha recuperado la gestión pública 15 años después de su privatización. Una comisión mixta, integrada por técnicos y políticos municipales, se encargó el pasado año de elegir la fórmula de explotación que resulte «más eficiente y sostenible» barajándose varias opciones. Realizar la recogida a través de otro servicio, crear otra empresa municipal o adaptar una ya existente. Regionalistas y socialistas han cumplido uno de sus compromisos más importantes, adquirido en la legislatura anterior y que ahora se hace realidad. El contrato con la empresa adjudicataria (Geaser) concluyó el 31 de diciembre de 2017, pero la compañía ha seguido prestando el servicio hasta que se ha concretado la municipalización de nuevo, por lo que «los vecinos no han notado ningún cambio».
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