La Guardia Civil detiene a tres personas en una operación antidroga en Ganzo

Vecinos de la localidad explicaron que la operación «a pesar de que se produjo de madrugada» produjo una gran expectación y «sorpresa» ya que «los agentes entraron derribando las puertas y sacando a la gente a la calle para identificarlos». Los detenidos fueron trasladados por la mañana al Palacio de la Justicia de Torrelavega donde el Juzgado número uno se ha hecho cargo del caso, aunque la Guardia Civil insiste en que la operación está aún abierta. La Benemérita seguía trabajando ayer en la operación abierta desde el pasado martes bajo el condicionante del secreto de sumario que ha dictado el juzgado. Los tres detenidos lo fueron después de que se produjeran entradas y registros, en la vivienda de Ganzo. Los agentes continúan trabajando en esta operación contando con colaboración de otras unidades además de la Policía Judicial de la Guardia Civil.

Mientras tanto algunos de los vecinos de Ganzo que pudieron presenciar desde sus casas el desarrollo de la actuación policial señalaron que no es la primera vez que acuden los agentes a esta zona, donde se sospecha que se trafica con drogas aunque insisten en que «se trata de hechos aislados porque aquí la gente va a lo suyo, se levantan, van a trabajar y regresan a sus casas, aquí no hay nada raro, otra cosa es lo que pase en esa finca».

Durante el día de ayer tuvo lugar la puesta a disposición judicial de todos los detenidos para la toma de declaración ante la juez titular del número 1 ya en presencia de los abogados de cada uno de los arrestados, que pudieron conocer así los cargos concretos que se imputan a los detenidos, mientras familiares y amigos esperaban a lo largo de la mañana en el exterior del Palacio de Justicia. Tras la toma de declaración, la jueza estimará lo que hace: si ordena el ingreso en prisión de los detenidos o si considera que procede su puesta en libertad. Mientras se mantenga el secreto de sumario pocos datos nuevos podrán conocerse de esta nueva redada que se produce en una zona en la que los vecinos reconocen que «hay mucho movimiento de gente». «Vinieron de madrugada y se escuchaban los gritos de la gente que vive en la casa, mientras la policía entraba en las casas echando la puerta abajo», relatan.

Fuentes policiales explican que este tipo de actuaciones son relativamente frecuentes cuando hay sospecha de tráfico de drogas, como la que se produjo recientemente en el barrio de La Inmobiliaria con la participación de una veintena de agentes del Cuerpo Nacional de Policía uniformados y de paisano, junto a la unidad canina. Una espectacular redada contra el tráfico de drogas en este barrio, que dio como resultado la detención de dos personas, más de una veintena de identificaciones y dinero en metálico incautado. El gran despliegue, que despertó expectación entre el vecindario extrañado por una redada de esta magnitud, incluyó registros de algunos de los establecimientos hosteleros de la zona.