Hacienda rechaza el recurso del Colegio de Arquitectos y desbloquea la restauración del Palacio municipal de Torrelavega

En un escrito de catorce páginas, el tribunal dependiente del Ministerio de Hacienda avala los argumentos esgrimidos desde la parte municipal, una defensa que cuestiona las alegaciones de Coacán y, más concretamente, cualquier riesgo o restricción que pudiera sufrir la participación de los arquitectos en la licitación. La estimación del recurso, corroboran en esa misma línea desde el TACRC, no supondría un beneficio concreto a la entidad recurrente, «por lo que solicita la inadmisión por falta de legitimación».

Ese argumento, una de las claves del dictamen, viene a desarmar uno de los varios ‘puntos débiles’ que según el colegio profesional revelaba esta licitación. A juicio de Coacán, el proceso debió reunir una serie de características a la altura de la complejidad del proyecto, esto es, de la rehabilitación del edificio civil más importante de Torrelavega tras su consolidación ‘in extremis’. En esa línea, Coacán echaba en falta un concurso de ideas –como sí se hizo en 2009, antes de la adjudicación del proyecto de Aybar Mateos– criterios de adjudicación distintos y plazos de ejecución más amplios.

El fallo del Tribunal niega tal necesidad y, de hecho, se apoya en los argumentos aportados por una de las propias empresas licitadoras que aspiran a llevarse el contrato de redacción del proyecto, CDS3. «Tanto el procedimiento abierto recurrido como el concurso de proyectos solicitado conllevan la contratación de arquitectos y tanto en un procedimiento como en el otro se garantizan los principios de igualdad, transparencia y libre competencia», sostiene la firma madrileña, candidata a la redacción de este plan de trabajo de 275.000 euros, igual que la UTE capitaneada por Cero y Voluar.

Alegaciones y argumentos al margen, el dictamen del Tribunal a favor de los intereses del Ayuntamiento de Torrelavega y de esta licitación viene a desbloquear uno de los proyectos más importantes de toda la legislatura y, sobre todo, las aspiraciones de la Administración municipal de captar estos más de cinco millones de fondos Feder en un momento de flaqueza económica.

Cabe recordar que al Consistorio no le sobra dinero en estos momentos ni le sobrará en los próximos. Solo el proyecto para soterrar las vías le costará cerca de 30 millones a las arcas municipales, obligando al Ayuntamiento a endeudarse durante «quince o veinte años», tal y como ya reconoció el equipo de gobierno (PRC-PSOE) hace unos meses.

La importancia de estos fondos quedó manifiestamente clara en palabras del alcalde, Javier López Estrada, en el último Pleno. «Entre otras cosas, esto de lo que estamos hablando es de jugarnos 5,2 millones de euros», le dijo al portavoz de Vox, Roberto García Corona, tras admitir que el Consistorio habría logrado obtener más puntos en la convocatoria de haberse presentado con el proyecto ya adjudicado.

Además, el regidor hizo una defensa férrea del procedimiento y el trabajo técnico en esta licitación. «Lo que hemos hecho hasta ahora está bien hecho. No es razonable decir que el Ayuntamiento se ha saltado la Ley de Contratos. Los expedientes están ahí. ¿Ganaremos? Creo que sí. Podemos perder. Y si perdemos, tendremos que seguir hacia adelante», declaró, apoyado además en los informes que, tras el recurso, emitieron los técnicos de Urbanismo, Obras y el secretario.

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