MARE instala paneles solares en El Mazo para reducir CO2 y gasto en electricidad

MARE inició a finales de julio el proceso de licitación del proyecto, que cuenta con un presupuesto de 125.127 euros y un plazo de ejecución de cinco meses. A la convocatoria se presentaron 15 ofertas y la Mesa de Contratación de la empresa pública ha acordado proponer como adjudicataria a la firma Wingreen EPC, cuya propuesta rebaja en un 35,4% el presupuesto base del concurso público. En la memoria justificativa de la contratación se señala que MARE, dentro de su compromiso medioambiental y con el objetivo de reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera asociadas a su trabajo, así como los costes de suministro eléctrico, quiere instalar placas solares fotovoltaicas en la cubierta de la nave principal del centro de recuperación y reciclaje de El Mazo. Dicha instalación se plantea en régimen de producción de energía eléctrica para autoconsumo y «conectada a la red con excedentes».

MARE se hizo cargo este año de la planta de El Mazo. La Corporación de la capital del Besaya tomó conocimiento en abril de la asunción por parte de la empresa pública de la gestión directa de las instalaciones y autorizó la disolución de Gesmator, la sociedad mixta encargada del acondicionamiento y restauración medioambiental del antiguo vertedero y la gestión de los residuos sólidos urbanos, tras concluir el plazo y las sucesivas prórrogas fijadas para ello. El Gobierno de Cantabria y el Ayuntamiento firmaron el convenio para llevar a cabo estas tareas en 1998.

La apuesta por las energías renovables y la sostenibilidad también es firme en el Consistorio de Torrelavega. Su último objetivo consiste en implantar un sistema de generación eléctrica fotovoltaica en el matadero municipal, con el fin de reducir el consumo, optimizar la inversión buscando la máxima rentabilidad y proteger el medio ambiente. Según la propuesta técnica, el matadero consume 316.723 kilovatios por hora al año, lo que supone un gasto en energía de 25.731 euros. Con el nuevo sistema de generación eléctrica fotovoltaica, que está en proceso de licitación, se generarán una media de 19.184 kilovatios hora por hora al año, lo que supondrá un ahorro para las arcas municipales de 13.874 euros, más de la mitad de la factura actual, que asciende a 25.731 euros. Además, se dejarán de emitir a la atmósfera 31,6 toneladas anuales de dióxido de carbono.

Los técnicos prevén la instalación en la cubierta del matadero de paneles solares de alta eficiencia y un sistema de monitorización para la gestión remota de los equipos, así como un registro histórico de producción y gestión de incidencias. El desembolso previsto para la ejecución del proyecto es de 117.880 euros. El Ayuntamiento quiere llevar a cabo esta iniciativa a la vez que actualiza las placas solares de la piscina cubierta de La Lechera, que dejaron de funcionar en 2015. Hace doce años, cuando las políticas medioambientales empezaban a cobrar más fuerza en las partidas presupuestarias de los ayuntamientos, Torrelavega dio un paso pionero en Cantabria instalando un sistema de climatización de placas solares en su piscina municipal, que cuenta a diario con cientos de usuarios.