Las obras del Hogar del Transeúnte estarán finalizadas en enero de 2023

Las obras del nuevo Hogar del Transeúnte de Torrelavega estarán finalizadas en enero de 2023, según adelantó ayer el alcalde, Javier López Estrada. El regidor, que visitó los trabajos que se llevan a cabo en el mismo solar -en la calle Pancho Cossío- en el que se ubicaba el viejo albergue municipal, acompañado del concejal y primer teniente de alcalde, José Manuel Cruz Viadero, el concejal de Asuntos Europeos, Bernardo Bustillo, y la concejala de Servicios Sociales, Laura Romano, aseguró que la finca que ocupaba el antiguo Hogar del Transeúnte albergará, en menos de un año, un edificio destinado a centro asistencial, centro cívico y alojamientos en régimen de alquiler temporal para situaciones de emergencia habitacional.

Las obras, que están siendo ejecutadas por la empresa Ascán, cuentan con una inversión de 1,4 millones de euros, y hasta ahora se han desarrollado «con normalidad», según los responsables de la adjudicataria, que explicaron que aún restan un par de semanas de trabajos de excavación y preparación del terreno antes de comenzar las labores de cimentación.

En cuanto a la posibilidad de encontrar agua con el movimiento de tierras debido a la proximidad de un arroyo, manifestaron que «hasta ahora» no ha habido problemas ya que «el agua se encuentra por debajo del nivel excavado». En este sentido, insistieron en que «ahora los trabajos se centran en consolidar el terreno antes de empezar con la cimentación».

Este nuevo equipamiento social se está levantando en el solar ubicado en la esquina de las calles Pancho Cossio con Pablo Garnica. Se trata de una actuación cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) en el marco del programa operativo plurirregional de España 2014-2020.

El regidor destacó la importancia de esta actuación que permitirá «incorporar a la red de infraestructuras sociales del Ayuntamiento un nuevo edificio moderno adaptado a las necesidades actuales de los vecinos». En la misma línea se expresó el primer teniente de alcalde, para quien se trata de una construcción «importante y necesaria que viene a resolver necesidades y demandas» existentes.

Por su parte, el responsable de Asuntos Europeos destacó que se trata de uno de los «proyectos estrella» de la Edusi, junto a la tecnoteca y la pasarela sobre el río Saja-Besaya. Con él, resaltó, se cumple con uno de los objetivos «principales» de los fondos europeos: «la inclusión social y la igualdad, no dejar a nadie atrás». También subrayó el papel «fundamental» de la Unión Europea en la «modernización» del municipio.

El nuevo edificio dispondrá de tres áreas con funcionamiento y acceso independiente: en primer lugar, un centro asistencial con capacidad para atender a treinta personas, sin incluir empleados u otro personal de servicio. Contará con catorce habitaciones y también habilitará dependencias comunes o de servicio (cocina, despacho, archivo, lavandería, recepción-ascensor-pasillos, mochilero, aula de actividad ocupacional, sala de estar, comedor, y servicios higiénicos).

Además, se habilitará un centro cívico de 50 metros cuadrados con acceso independiente desde el exterior. Y el resto de la superficie edificable se destinará a alojamientos en régimen de alquiler temporal para situaciones de emergencia habitacional de uno y dos dormitorios.

El pasado mes de noviembre concluyeron los trabajos para dejar libre la parcela antes de comenzar la construcción del edificio, que tendrá cinco plantas. La empresa encargada de llevar a cabo el proyecto de demolición había aplazado «hasta última hora», a petición del Ayuntamiento, el derribo del centro cívico del barrio (Paseo del Niño), dado que todavía era sede de dos colectivos: la Asociación del Vecinos y la Asociación StelaFotográfica. Finalmente, el derribo se llevó a cabo y lo mismo ocurrió con el cierre perimetral, quedando la finca preparada para el inicio de los trabajos de construcción del centro asistencial.

Las monjas franciscanas que gestionaban el Hogar del Transeúnte desde su creación, en agosto de 1985, cesaron en su actividad en octubre de 2019 como consecuencia de su avanzada edad y la falta de relevo generacional. Las instalaciones, muy deterioradas, estaban integradas por varias naves, almacenes y barracones. El Consistorio firmó un convenio con Cruz Roja para que preste el servicio mientras se construye el nuevo edificio asistencial, por lo que ahora será necesario también redactar un pliego de condiciones para que una empresa gestione el nuevo Hogar del Transeúnte.

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