El Parlamento rechaza la petición de Vox para revisar los materiales en las aulas a raíz de las viñetas sexuales de Torrelavega

Esa discrepancia quedó reflejada en el debate, aunque este trascendió más allá de unos hechos acontecidos en Torrelavega, por otro parte tildados de «graves» por parte de la portavoz del grupo proponente, Leticia Díaz, y ya reconocidos como un «error» por el propio Ayuntamiento. El debate fue más allá. En su exposición, la diputada no sólo subrayó la importancia de «revisar adecuadamente» el currículo de los centros escolares y proteger a los menores de los «contenidos inadecuados», sino también del «adoctrinamiento» que, según su partido, se produce en las aulas contra los alumnos: «La ideología de género, el cambio climático, el laicismo... Todo eso está introducido como una forma de conseguir el cambio de pensamiento de los jóvenes».

Las intervenciones siguientes reflejaron que, en el Parlamento, nadie comparte esa visión fuera de Vox. Tampoco Álvaro Aguirre (PP), que calificó de «errática» esa radiografía. «Plantea medidas injustas e imposibles de aplicar», le explicó, antes de recordarle que «la aplicación de los currículos no puede estar sometida al previo consentimiento de los padres» y acusarla de apoyar una suerte de «pin parental». Por último, y antes de asegurar que «la educación con este Gobierno –el regional, del PP– está en las mejores manos», zanjó así:«¿Nuestro sistema educativo funciona bien? Sí;¿Hay elementos de mejora? Por supuesto».

Más o menos en esa línea quiso pronunciarse Teresa Noceda (PRC):«En los colegios se utilizan miles de publicaciones, manuales, artículos de internet, etc. Dentro de estos miles, se ha colado uno con dos viñetas al parecer inapropiadas. ¿No estará elevando el nivel de categoría a una anécdota?», se dirigió. Luego fue más dura. «En el fondo, ustedes no están en contra de que haya ideología; están a favor de que sólo exista la suya. Estamos aquí perdiendo el tiempo con sus ofuscaciones ideológicas», cerró.

A eso se refirió también el diputado socialista, Jorge Gutiérrez, a la hora de asegurar que «Vox no entiende la realidad social de este país». Para él, la propuesta que trajeron los de Díaz al Parlamento fue una «ocurrencia». De hecho, este la contrapuso a los valores y el «respeto» en el que, como dijo, están instruidos los jóvenes. «Torrelavega es una ciudad abierta, plural, trabajadora y decente. Nos sentimos orgullosos de nuestros centros educativos y docentes», manifestó.

Aquella fue una de las pocas menciones que, paradójicamente, se hizo de la capital del Besaya en este punto del orden del día. En él estaba incluida también una PNL del PP, solicitando una investigación en el Ayuntamiento para esclarecer lo sucedido. Finalmente, los azules la retiraron, aunque estudian presentarla otra vez.