El Pleno rechaza el recurso de Sniace y sigue adelante con la expropiación del Óscar Freire

El Ayuntamiento de Torrelavega dio ayer un paso importante para hacerse con el complejo deportivo Óscar Freire y los terrenos anexos conocidos como 'El Patatal', propiedad de Sniace. La Corporación aprobó, con la abstención del PP y Torrelavega Sí, desestimar el recurso de reposición interpuesto por la empresa contra el acuerdo plenario que dio luz verde a la expropiación forzosa de las instalaciones. También decidió rectificar la superficie afectada, que pasa de 144.000 a 138.000 metros cuadrados, dado que parte de las fincas están situadas en el vecino municipio de Santillana del Mar. Mientras tanto, continúa la batalla judicial. El Juzgado atendió la semana pasada la petición del Consistorio de paralizar la orden de desahucio, mientras estudia el recurso municipal contra la sentencia que dio por finalizado el convenio de alquiler del complejo deportivo.

Sniace solicitó al Ayuntamiento el archivo del expediente de expropiación forzosa. Afirmaba en su recurso de reposición, ahora rechazado, que el documento se encuentra «viciado de graves defectos de nulidad de pleno derecho». La empresa señalaba que procedía la anulación del acuerdo plenario de aprobación definitiva del expediente por su «absoluta falta de motivación». Además, afirmaba que procedía el archivo por haberse producido la «caducidad» del mismo, dado que entre la aprobación inicial (27 de julio de 2017) y la definitiva (27 de febrero de 2018) transcurrieron «sobradamente» los seis meses que «constituyen el plazo máximo para dictar resolución». Sniace esgrimía como tercer argumento en su defensa el «vicio de nulidad de pleno derecho» del que adolece el procedimiento expropiatorio municipal por «afectar a terrenos que no se incluyen en el término municipal de Torrelavega».

Los informes técnicos del Ayuntamiento indican que sí hay motivos suficientes para la obtención del complejo deportivo y 'El Patatal' mediante expropiación forzosa y que las alegaciones de Sniace fueron contestadas, por lo que «no se ha producido indefensión». También concluyen que el expediente no está caducado y que no es nulo de pleno derecho por afectar a terrenos de Santillana del Mar, que, finalmente, dejan ahora de estar afectados.

El concejal de Obras, Javier López Estrada, dijo que se están cumpliendo los trámites y ahora toca enviar a la empresa la valoración de lo que se pretende expropiar (hoja de apremio), descontando las inversiones públicas realizadas en las instalaciones y las deudas que mantiene Sniace con el Ayuntamiento. López Estrada pidió disculpas por no poder aportar esa documentación hasta el próximo miércoles, cuando se celebrará una reunión extraordinaria de la comisión que preside. Esa falta de documentación llevó a los grupos PP y Torrelavega Sí a abstenerse, y a protestar porque «no se están haciendo bien las cosas» para solventar las dudas que van surgiendo.

Otro acuerdo importante consistió en la aprobación inicial del Plan Estratégico de Torrelavega (2016-2026), que ahora será sometido a información pública durante dos meses, con el fin de recabar las sugerencias y observaciones que se estimen oportunas. La consulta será individualizada en el caso de los agentes sociales, que ya fueron consultados para elaborar el documento.

Según el texto inicial, Torrelavega será en 2026 una ciudad que ha sabido compatibilizar las ventajas que ofrece una urbe pequeña, y que se ponen de manifiesto en valores como la proximidad, la calidad de vida y la facilidad de relación e integración con el entorno natural, con las ventajas y características de una ciudad grande en cuanto a su nivel de actividad, empleo y dotación de servicios.

Votaron en contra todos los grupos de la oposición, excepto Torrelavega Sí. Según López Estrada, es un documento «bueno» para la ciudad, que plantea «retos importantes». Sin embargo, para Miguel Remón (PP) es algo que le viene «muy grande» al equipo de gobierno (PSOE-PRC) porque «no tiene un proyecto de ciudad». A Blanca Rosa Gómez Morante, portavoz de Torrelavega Sí, le parece que es «la aportación de un trabajo común» y a Iván Martínez, de ACPT, algo que «nace muerto» por la falta de unanimidad en la Corporación. El edil de Torrelavega Puede, David Barredo, lo ve como una herramienta «electoral y demagógica» del equipo de gobierno.