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El fichaje regionalista del número dos en funciones de la Consejería de Obras Públicas, Francisco Javier Gómez Blanco, para que ocupe el cargo de asesor de Urbanismo dentro del equipo de gobierno ha generado una sonada polémica en el principal partido de la oposición. El Partido Popular (PP) en Torrelavega ha salido este martes al paso de la noticia, adelantada por El Diario Montañés, mostrando su rechazo a la incorporación del director general de Urbanismo y tildando la inscripción de este como «una fórmula para encajar compañeros que finalizan su trabajo en otros departamentos por cambio político». Blanco (Suances, 1969) es, junto a otros 113 altos cargos del Ejecutivo autonómico en funciones, uno de los responsables que estaba en la puerta de salida tras los comicios del 28 de mayo.
Los populares, liderados por su candidato y portavoz, Miguel Ángel Vargas, han sido muy duros con la decisión del alcalde, Javier López Estrada, de incluir a Blanco entre los puestos de confianza del Ayuntamiento, un cargo recuperado después de veinte años inutilizado -nadie lo ostentaba desde la legislatura 1999-2003- y llamado a reforzar los planes de Urbanismo, Vivienda o suelo industrial, entre otros, de la mano del concejal -aún desconocido-. En eso ha querido hacer hincapié el PP, atónito ante una «ampliación de la estructura» municipal que consideran injustificada teniendo en cuenta que ya «existen concejales capaces de asumir un área y el Ayuntamiento ya cuenta con técnicos en los diferentes servicios».
No es ahora, según el los azules, cuando toca hacer fichajes para blindar los planes del ejecutivo local. «Cuando se debe pensar en los perfiles de los futuros concejales para poder desarrollar las labores de gobierno en todas las áreas municipales es en el momento de hacer las listas electorales», ha reprochado Vargas, antes de ironizar y preguntar al alcalde «si los proyectos que los regionalistas necesitaban acabar desde la Alcaldía se ciñen exclusivamente a contratar como cargos de confianza en el Ayuntamiento a aquellos que ahora cesan en el Gobierno regional».
Esta ya es la primera reprimenda oficial de los populares en esta legislatura, aunque ya hubo otras en el lapso entre las elecciones y la constitución del Ayuntamiento. Este martes, Vargas ha hecho un resumen de todas. «Después de negociar el reparto de sillones entre PRC y PSOE, ahora viene la contratación de nuevos cargos de confianza. Lo de pensar en la ciudad ya se verá cuándo toca», ha cargado, lamentando así «la primera factura que el pacto de regionalistas y socialistas pasa a los torrelaveguenses después de perder las elecciones».
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