El PSOE resta importancia al retraso de medio año en la obra del desvío del tren

Su visión de cómo van las obras en el arco norte difiere de la manifestada por el ala regionalista de la coalición, que no titubea a la hora de cifrar el retraso en hasta ocho meses –cabe recordar que las obras empezaron en diciembre de 2023–. Para Urraca, sin embargo, la demora que reflejan las labores –con plazo de ejecución de un año– es «pequeña». Una cosa es segura: hasta ahora la actividad ha brillado por su ausencia en el Bulevar Ronda, incumpliendo la previsión para reanudar la actividad que trasladó Adif para el pasado lunes a preguntas de este periódico y evidenciando esa «rapidez» a la que alude estos días el jefe del PSOE en la ciudad. Socialistas y regionalistas sí coinciden en lo fundamental:esperan que la obra se reanude pronto. Eso sí, no hacen aspavientos ni alzan la voz.

Las dificultades de la empresa adjudicataria en la actuación y la falta de avances en la zona en general tendría origen «fundamentalmente»en las complicaciones que han sufrido en los últimos meses las tareas para desviar los servicios y canalizaciones afectadas, como los de la luz. Para Urraca, dichos problemas ya estarían resueltos y deberían haber permitido reanudar los trabajos estructurales la semana pasada, tras la decisión de Adif de posponer el comienzo de las mismas una semana con motivo de las fiestas. «Ahora de nuevo adquirirá rapidez», llegó a avanzar Urraca el martes, en una rueda de prensa posterior a la Comisión Informativa de Obras.

Entre tanto, las labores previas al soterramiento siguen sin avanzar de forma destacable y sin impedir tampoco los paseos o trotes de los vecinos por esta zona. En estos últimos ocho meses, desde que una delegación de autoridades se citó para celebrar estos 4,7 millones en obras, pocos de los cambios planteados en el programa para estas alturas se han traducido a hechos. Se han ejecutado algunos trabajos en algunos tramos del Bulevar, el entorno del Parque Intergeneracional o la rampa que da acceso al tanque de tormentas –donde el tren pasará de la vía original a la temporal–, pero ninguno corresponde a la fase estructural.

Efectos indeseados

Es más, uno de los efectos indeseados de la obra más comentados, el derribo de las pistas de skate de La Lechera, sigue sin producirse. El Ayuntamiento, que organizó una fiesta de despedida por todo lo alto a principios de año, contaba con tener que dar el adiós definitivo a esta instalación a mediados de año. Pero los patinadores pueden seguir patinando tranquilamente, igual que los conductores pueden circular sin problemas por el puente entre Aspla y Sniace, que en un futuro estará cortado al tráfico rodado y peatonal.

¿Cuándo? Es difícil saberlo, sin que Adif arroje luz de cómo están ahora los plazos de la obra –a pesar de las preguntas de este periódico–. Sí está claro durante cuánto tiempo estará cortado ese paso:al menos cuatro años. O mejor dicho, tantos años como duren las tareas para enterrar las vías. El viaducto a modo de aliviadero para encauzar el cauce del Sorravides, el muro pantalla, la pasarela peatonal provisional… La famosa vía auxiliar y los efectos indeseados derivados de su construcción siguen sin llegar.

Sin aspavientos

Y todo mientras el mayor proyecto de ingeniería en la historia de la ciudad sigue sin proyecto de obra. La aprobación del mismo y su salida a licitación por al menos 126 millones, después, es la gran cuestión que preocupa al Ayuntamiento. De ahí la ausencia de aspavientos y críticas. El Consistorio quiere su soterramiento; el Gobierno regional no será quien lo impida; y al central no quieren darle motivos para que cambie de opinión, pese al convenio firmado en 2018.