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Torrelavega volverá a tener cine después de dos décadas huérfanas y sin unas instalaciones realmente orientadas a proyectar películas en la ciudad. El Gobierno de Cantabria invertirá alrededor de 4 millones de euros en el antiguo Cine Pereda, cerrado a principios de siglo, para rehabilitarlo ... en profundidad y crear cuatro salas de cine municipales con cerca de 500 butacas en estas y otras instalaciones aledañas ubicadas en estas galerías –y adquiridas también por el Consistorio–. La idea es crear esas cuatro salas de proyección de entre 70 y 120 espectadores cada una. Todos estos detalles ya están siendo reflejados en un anteproyecto en el que trabaja el Ayuntamiento de Torrelavega, que ha logrado obtener la colaboración del Ejecutivo regional tras presentar la idea a la presidenta autonómica, María José Sáenz de Buruaga.
El cronograma fijado por ambas partes es el siguiente: redacción del anteproyecto, en 2024 y a cargo del Consistorio; redacción del proyecto propiamente dicho, en 2025 y con dinero de la Administración regional; y la rehabilitación del Cine Pereda y las salas aledañas, en 2026 y también con la financiación del Gobierno de Cantabria. Una vez adecuadas las instalaciones, el Ayuntamiento contará con el actor y cineasta torrelaveguense Antonio Resines en el papel de colaborador a la hora de encontrar a una empresa gestora.
La noticia viene a poner un final feliz a dos décadas anómalas en la ciudad del Besaya, una capital de comarca que, a pesar de su tamaño (51.000 habitantes) no cuenta con un cine propiamente dicho en la ciudad. De ahí las palabras de la presidenta regional, María José Sáenz de Buruaga, ante los medios de comunicación: «Estamos ante un proyecto muy importante, muy necesario», ponderaba, antes de subrayar la importancia de esta iniciativa colaborativa en términos de dinamización «social, cultural y económico» para «Torrelavega y su centro». Aunque «incipiente», este es, para Buruaga, claramente un «proyecto de legislatura».
Quedan todavía muchos meses para que se inviertan esos cuatro millones de euros en las Galerías Pereda. De momento, Gobierno y Ayuntamiento quieren suscribir un convenio de colaboración para fijar la hoja de ruta, un anhelo de la sociedad torrelaveguense y también del Ayuntamiento. Su alcalde, Javier López Estrada, se mostraba muy ilusionado con la idea. «Queremos que los torrelaveguenses y los vecinos de la comarca vuelvan a tener cine, tener una ciudad más viva los fines de semana, con más posibilidades culturales para todos es una de las claves. Ya estamos preparando la redacción del convenio, después de conseguir el apoyo de la presidenta, y de sus consejeros de Hacienda y Cultura».
Han pasado muchos años desde que las Galerías Pereda alcanzaron su apogeo comercial y de dinamización en Torrelavega, un periodo brillante recordado con nostalgia por los ciudadanos y que está estrechamente vinculado a los años de bonanza de estos cine. Propiedad de unos empresarios asturianos, la sala Pereda entró en funcionamiento en los años ochenta, tenía 400 localidades y se explotó bajo la razón social 'Torresan SA'. Con la decadencia de los cines, en los años 90, esta sala también entró en crisis y, aunque se barajaron posibilidades de cierre en varias ocasiones, finalmente, la clausura fue obligada cuando en el mes de abril de 2001 se produjo un incendio en el interior.
Aquello fue un antes y un después no sólo para el propio cine, sino también para la actividad comercial afincada en estas galerías, que no han vuelto a prosperar como entonces. La posterior compra del cine por parte del Ayuntamiento de Torrelavega pareció iluminar un posible resurgimiento de la zona, pero toda actuación quedó paralizada con el estallido de la crisis económica a finales de la primera década del siglo. Y así ha sido hasta ahora, hasta que el Consistorio, a través de López Estrada, ha presentado este proyecto a la presidenta regional en diferentes encuentros celebrados en las últimas semanas.
A uno de estos, de carácter más informal, acudió el propio Antonio Resines, que se erige como colaborador y cara visible de un proyecto en el que, como torrelaveguense y actor de prestigio en el panorama nacional e internacional, piensa aportar sus contactos en la industria para potenciar el atractivo de las salas y los títulos que en estas se proyecten en los próximos años. La gestión del cine, que será público, correrá a cargo de una empresa privada una vez terminen todos los trabajos de rehabilitación en todos los locales de las galerías.
La noticia viene a arrojar luz no sólo sobre el futuro de esta zona comercial, sino también sobre el uso que el Ayuntamiento pretende dar a los espacios adquiridos hace casi veinte años. Hasta ahora, resultaba casi imposible no asociar ese debate al del Palacio municipal, también inmerso en su propio debate sobre el futuro de sus dependencias, ubicadas justo al lado. Finalmente, en lugar de ampliar esas oficinas, se ha impuesto el criterio de revitalizar la zona mediante la recuperación del Cine Pereda para los vecinos de la ciudad, huérfanos de una gran pantalla en condiciones desde que los cines Pereda (2001) y Arlequín (2003) desaparecieron de la cartelera. En los últimos años, sólo la programación de la Casa de Cultura ha compensado relativamente a los cinéfilos de Torrelavega.
De Torrelavega y de la comarca del Besaya. Poniendo en fila los municipios ubicados en esta zona de Cantabria, los nuevos cines que quieren abrir el Ayuntamiento y el Gobierno de Cantabria dentro de dos años cuentan con un público objetivo de no menos de 100.000 personas. De hecho, esos números y otras tantos han sido estudiados ya por parte de esa parte del trato que compone Resines, apoyado en un «estudio de viabilidad» en el que han participado especialistas de la industria, según traslada el actor a este periódico. «La iniciativa es viable económicamente», aseguraba este viernes, convencido de la importancia y lo beneficioso de este proyecto para su ciudad natal.
Confiesa Antonio Resines que el germen de la idea pudo nacer en verano de 2022, después de que él, durante su discurso para el pregón de La Patrona ese año, se refirió a la ausencia de las salas de cine en su ciudad natal y a su deseo, claro, de ver revertida esa situación más pronto que tarde. Fue entonces cuando el alcalde, Javier López Estrada, aceptó el reto. «Empezamos a hablar sobre esa necesidad, sobre lo bonito que sería tener un cine. Al final, nos lanzamos», recuerda de aquellas semanas el actor, confiado del potencial de esta iniciativa para la capital del Besaya. «Puede haber sesiones matinales, proyecciones con mayor vocación comercial… De todo. Puede ser una gran fuente de riqueza. Además, va a estar en un sitio ideal, en pleno centro de la ciudad, con un gran aparcamiento y junto un entorno lleno de comercios», pondera, antes de tildar la iniciativa como «una gran noticia para Torrelavega y para muchos cántabros de la zona». En esto último hace gran hincapié Resines, antes de citar el área de influencia de Torrelavega, la comarca y esos más de 100.000 habitantes que habitan aquí. «Cuando esté terminado este proyecto, no hará falta que vayan a Santander para disfrutar del cine», subraya el actor torrelaveguense.Se define a sí mismo como «colaborador» dentro de esta iniciativa, una persona capaz de «facilitar contactos entre empresas y posibles gerencias de cines con experiencia» interesadas en este proyecto. «Los empresarios que terminen siendo partícipes, lo harán a sabiendas de que pueden conseguir beneficios para su compañía. Este será un proyecto viable», reitera, ilusionado con la apertura de un cine, el Pereda, que, aunque no llegó a conocer por dentro, sí recuerda como una «institución muy querida» en Torrelavega.
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