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Primera edición. ·
Con estos premios se sitúa a la comarca como lugar de oportunidades para las mujeres y a ellas y su talento como motor de desarrolloDurante muchos años, han sido grandes los obstáculos e impedimentos que la mujer se ha ido encontrando a la hora de acceder al mundo empresarial o, incluso simplemente, al mercado laboral. Entre ellos, la propia falta de referentes que inspiren y sirvan de ejemplo para que otras vean el reflejo de que ser parte de este modelo de sociedad sí es posible.
Ahora, con pequeños pasos pero firmes, es indiscutible la alta participación de las mujeres y su implicación en el fortalecimiento del tejido empresarial. La visibilidad femenina en este mundo es cada vez mayor, como trabajadoras, como directivas, pero también como emprendedoras que deciden comenzar su propia andadura empresarial poniendo en marcha proyectos de gran valor y aporte.
Porque lo cierto es que el papel de la mujer en este ámbito ya no es una cuestión de cuotas, ni de políticas de igualdad, ni es una cuestión de equidad. Su implicación y su plena inserción en sectores como el industrial, el comercial o el empresarial aporta una nueva visión, una inyección de valor a todo el conjunto de la sociedad y a su desarrollo social y económico.
Por ello, desde la Cámara Torrelavega, Cinbesa y la Oficina Acelera Pyme Rural Cantabria pusieron en marcha los Premios Futuro en Femenino Besaya. Porque junto a todas las medidas, proyectos e iniciativas para impulsar esa plena inserción de la que hablábamos, era necesario también un reconocimiento al duro trabajo que ellas llevan a cabo, destacando, además, el papel de aquellas profesionales que contribuyen a consolidar la igualdad en las áreas en las que desarrollan su labor.
Fuente de inspiración
Patrocinados por Laboral Kutxa y con el impulso de El Diario Montañés y la colaboración de la Asociación de Mujeres Empresarias de Cantabria, los premios Futuro en Femenino Besaya entregaban el pasado jueves en la sede de la Cámara de Comercio de Torrelavega estos reconocimientos a cinco mujeres que, con su «esfuerzo y tesón», decía Carlos Augusto Carrasco, presidente de la entidad, «inspiran e inspirarán a otras mujeres», facilitando el camino hacia unos logros aún mayores en el futuro.
Matizaba, además, el anfitrión del evento que «con la primera edición de estos galardones, buscamos premiar a todas esas empresas que apuestan por el desarrollo de talento femenino y por la igualdad real de oportunidades», porque para Carrasco, «necesitamos más mujeres referentes pero, por encima de todo, necesitamos empresas inspiradoras que se conviertan en agentes de cambio social».
Reconocimientos
Tras el presidente de la Cámara de Comercio de Torrelavega, comenzaba una entrega de premios en la que las emociones y los nervios pero también el orgullo por lo llevado a cabo, afloraban en cada discurso de agradecimiento de las distinguidas.
Rosalía Blanco, de la Oficina Acelera Pyme Rural Cantabria, desde donde cuentan una línea específica de contenidos orientados a la digitalización de la mujer empresaria rural, fue la encargada de entregar el galardón en la categoría de 'Compromiso Social o Empresarial', a Silvia Prellezo, de Prellezo de la Riva Consultores. Un reconocimiento otorgado «no solo por su actividad empresarial, sino por su orientación a la sostenibilidad y mejora continua de las pymes para las que trabaja; por su apoyo al sector económico de su entorno y especialmente –matizaba Blanco– por su compromiso y responsabilidad social demostrando que no solo es cosa de grandes corporaciones».
El premio 'Nuevo Talento' de esta primera edición, que fue entregado por Héctor Sáinz, director de la oficina de Torrelavega de Laboral Kutxa, traía consigo la combinación de un nuevo proyecto que ve la luz arropado por años de aprendizaje y herencia proveniente de la tradición familiar. Las hermanas Fernández Arce, Ana y Raquel, de Sobaos Arce, recibían este premio con el que, en palabras de Sáinz, se pone el valor «el trabajo y la dedicación de dos mujeres, que después de estar formadas profesionalmente y académicamente, han sabido mantener el legado de su familia en sus recetas artesanas».
María Concepción Calderón, al frente de 'Cabina de Estética y Peluquería Conchi', recogía la estatuilla a la 'Sostenibilidad y Medio Rural' con la que se buscaba «valorar la importancia de las mujeres que llevan negocios en un entorno rural porque es más que un sector estratégico para Cantabria». Celia Macho, de El Diario Montañés, ponía en valor, antes de entregarle el premio, el trabajo de «una mujer que ha hecho funcionar un negocio que para mí es una muestra de lo que necesitamos en estos entornos: servicios que nos permitan vivir a gusto en nuestro pueblo, sin ideas mágicas difíciles de materializar, con una buena formación y trabajo constante».
Para la última de las categorías, la de 'Innovación', subía de nuevo al escenario Carlos Augusto Carrasco quien, antes de otorgar el premio a Elena Ansótegui, al frente del proyecto Wypo, quiso hacer énfasis en la importancia de esta innovación «como pata fundamental para un desarrollo y un cambio productivo que garantice a las generaciones venideras un futuro mejor».
Con esta última distinción se ponía punto y final a la primera edición de Futuro en Femenino Besaya, unos premios que, con perspectiva de futuro, han colocado a esta comarca como un lugar de oportunidades y crecimiento para todas las mujeres, y a ellas y a su talento como motor de desarrollo de la zona.
«Hay infinidad de proyectos sociales que encajan con las pequeñas empresas». Para Silvia Prellezo, consultora empresarial al frente de 'Prellezo de la Riva Consultores', recibir un premio como este es importante «por un lado para reivindicar la figura de la mujer en el tejido empresarial y visibilizar que, a estas alturas, seguimos sorteando muchas desigualdades y brechas en el mundo laboral». Pero también lo es como herramienta para «crear conciencia» sobre el papel de las personas autónomas y la pequeña empresa, «un eslabón fundamental en la economía nacional, autonómica y local». El suyo es un reconocimiento al compromiso social que Prellezo mantiene desde su proyecto empresarial. Una posición que, para la premiada, es fácilmente extensible ya que «existe una infinidad de proyectos de carácter social, desde lo más local hasta lo más internacional, que puede encajar con la actividad que desarrollamos las pequeñas empresas de Cantabria».
«El comercio local merece la pena y estamos dispuestas a demostrarlo» . «Firmes defensoras del comercio local», Ana y Raquel Fernández Arce, ponían en valor durante su discurso que «Torrelavega está repleta de posibilidades y grandes comerciantes», porque «el comercio local merece mucho la pena y nosotras estamos dispuestas a demostrarlo». Agradecidas por un reconocimiento «que nos llega en casa», donde además, «se premia el esfuerzo y el trabajo realizado por mujeres», las hermanas Fernández, gestoras junto con su hermano Javier del proyecto de 'Sobaos Arce' destacaban que «emprender es superar retos», primero, «el vértigo de ponerse en marcha y levantar la persiana», y después, «el miedo a estar a la altura». Y es que ellas, han contado con el legado de su madre, Cioni Arce, de quien aprendieron «valores como el esfuerzo, la honestidad y el sacrificio. Ojalá seamos capaces de inspirar a las generaciones que vienen por detrás».
«Emprender en estas zonas contribuye a que no pierdan su identidad». «Salud, belleza y bienestar» es lo que Concepción Calderón ofrece a quienes se acercan a 'Cabina de Estética y Peluquería Conchi'. Un negocio que ella misma puso en marcha en Hinojedo (Suances) en 1999 con la ayuda de su padres. «Comenzar en un entorno rural no es fácil. Por aquí no pasa tanta gente por delante del negocio como puede suceder en una ciudad». Sin embargo, para Conchi emprender en estas zonas significa «seguir contribuyendo a que el medio rural no pierda su identidad, a que no haya una despoblación, a que todos podamos continuar aquí, trabajando y tirando hacia delante». Por ello, recibir el premio en la categoría 'Sostenibilidad y medio rural' es «todo un orgullo», dice, «un empujoncito en la espalda para poder continuar», el reconocimiento «a lo que te cuesta levantarte por las mañanas para luchar y tirar para adelante con todo y con todos».
«Es un orgullo que se reconozca el talento de la mujer y su capacidad». 'Wypo' es una startup que comenzó con un equipo femenino. Un equipo liderado por Elena Ansótegui quien recibía «entusiasmada» su reconocimiento a la innovación. «Estoy muy agradecida al Grupo Pitma por confiar en mí y en este proyecto; a todo el equipo de Wypo, por su compromiso y talento en el día a día; y a mi familia que, tras cada intensa jornada laboral, hace que mi día sea perfecto». Para Ansótegui este premio es también un paso más en el reconocimiento al papel de todas las mujeres en el sector empresarial así como en el mundo laboral en general. «La mujer no siempre ha tenido las mismas oportunidades, y que sople un poco el viento a favor nos ayuda para recortar la brecha en la carrera a la meta». Por ello, para la premiada «es un orgullo personal y profesional que se reconozca el talento de la mujer y su capacidad».
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