Torrelavega avanza en el plan de mejora del Patatal, que se ejecutará durante todo 2025

La tediosa tramitación administrativa que requieren grandes proyectos como este empieza a dar sus frutos y a revelar detalles importantes sobre el mismo: desde el dinero, 990.058 euros; hasta los doce meses de plazo contemplados para restaurar el parque, llamado a ser el gran pulmón verde del municipio junto a La Viesca. La duración de las tareas es un asunto clave porque atañe a uno de los requisitos clave para que esa subvención llegue a las arcas locales: los trabajos -que de acuerdo a los plazos se alargarán durante todo 2025- deberán terminar antes de 2026, de acuerdo a las condiciones a las que se han comprometido Torrelavega y otros municipios atendidos por el Ministerio.

La Concejalía de Medio Ambiente reconoce la complejidad de la maraña administrativa que envuelve a un proyecto de este calado, pero asegura que podrá licitar la redacción del proyecto en «dos semanas» y, sobre todo, su ejecución «en septiembre» para cumplir todos esos plazos.

Entre tanto, el departamento de Patricia Portilla recaba documentación para dar luz verde a la redacción del proyecto y pulir todos los pormenores. En esta antesala a las licitaciones, el Consistorio también avanza en el proyecto de ejecución y dirección de obra para todas las actuaciones que afectan al proyecto, estando el expediente ahora en la sección de contratación -en la fase de petición de esos informes-.

Y todo esto mientras los técnicos continúan trabajando en la licitación conjunta de otras actuaciones para dar cobertura a los planes de comunicación, gobernanza y seguimiento de indicadores previstos en este ambicioso proyecto, volcado en mejorar un entorno ambiental que, aunque falto de mantenimiento, se mantiene como uno de los espacios verdes más emblemáticos de la capital del Besaya.

La del parque es una de las «tres estrategias» que la edil del ramo enumera a la hora de describir el plan 'Torrelavega Conexión Natural'. Para el Patatal hay preparadas labores de control de invasoras, de restauración natural, de mejora de la seguridad... Los objetivos para recuperar la zona y abrirla a la población condensan gran parte de ese capítulo para Las Tablas. «Transformará el entorno en un espacio más accesible e integrado en la ciudad», avanza Portilla, ilusionada a su vez con la integración del parque en el anillo verde de la ciudad.

Pero hay otras dos ramas pendientes dentro de este «ambicioso» proyecto: desde la «mejora de la biodiversidad de áreas naturales degradadas en el entorno urbano y la periferia», con tres actuaciones de este tipo contempladas en marzo; «hasta la naturalización de patios en los colegios públicos de la ciudad».