Torrelavega cambia eucaliptos por árboles autóctonos para mejorar el medio ambiente

El presupuesto base de licitación es de 123.789 euros y el plazo de ejecución, de seis meses. Las empresas interesadas pueden presentar sus ofertas hasta el 2 de noviembre. La subasta pública se ha dividido en dos lotes, que corresponden con la superficie de las dos fincas. La de La Viesca tiene 16,9 hectáreas y la de Río Cabo, 18,01. El alcalde, Javier López Estrada, explica los objetivos que se persiguen: «Teníamos la posibilidad de generar dos recursos ambientales importantes para el municipio. Creemos que es el mejor camino para mejorar nuestra infraestructura verde. Al final, las explotaciones maderables generan un valor económico, pero creemos que es superior el bien que hacemos a la ciudadanía con plantaciones autóctonas y pequeños recursos que faciliten la estancia en esos espacios naturales».

En el caso del cementerio municipal de Río Cabo, el mayor de Torrelavega, cabe destacar que está rodeado casi en su totalidad por eucaliptos. Lo mismo ocurre con la parcela en la que se encuentra ubicado el antiguo campo de fútbol de La Viesca. El lugar forma parte del parque de La Viesca, que fue declarado en 2016 primer Área Natural de Especial Interés de Cantabria.

López Estrada señala que a la vez que se lleva a cabo el proceso de enajenación del aprovechamiento maderable, los técnicos redactarán el proyecto para la plantación de árboles autóctonos en las dos fincas, que «se convertirán en espacios para disfrute de la población». La mayor parte de las parcelas del municipio destinadas a este tipo de explotaciones están situadas en el monte Dobra y son propiedad de la Junta Vecinal de Viérnoles, que consigue sus principales ingresos económicos a través del aprovechamiento maderable de las mismas. Según el pliego de condiciones técnicas de la licitación de la tala de eucaliptos en Río Cabo y La Viesca, ambas masas forestales han alcanzado el máximo de producción estimada para este tipo de plantaciones y es el momento oportuno de establecer el cambio de modelo de explotación. La empresa que resulte adjudicataria deberá cortar los eucaliptos dentro de la zona señalada, no pudiendo realizar la tala de ninguna otra especie, evitando cualquier daño a la masa forestal restante.

En las zonas con cauces de agua, la concesionaria tendrá que mantener la vegetación de ribera existente, no acumulando restos de corta y tomando medidas para evitar que las aguas se enturbien. La altura del tocón no deberá sobrepasar los 10 centímetros y el apeo del arbolado tendrá que realizarse con cortes limpios y horizontales. Tampoco podrán quedar en el monte restos de troncos o ramas grandes, y el apeo se realizará de forma que la sección de corta resulte lo más uniforme posible y la caída de los árboles deberá dirigirse de manera que no cause daños.