Secciones
Servicios
Destacamos
Hace once años, en 2011, cuando las políticas medioambientales empezaban a cobrar más fuerza que nunca en las partidas presupuestarias de los ayuntamientos, Torrelavega dio un paso pionero en Cantabria instalando un sistema de climatización de placas solares en su piscina municipal, ubicada en el ... complejo deportivo de La Lechera. Valorado en 290.000 euros con cargo al Plan para el Estímulo de la Economía y el Empleo (E) del curso anterior, este sistema térmico supuso un salto de modernización importante para la instalación, capacitada desde entonces para aprovechar el recurso de la energía del sol, almacenarla en los depósitos y calentar así el agua de los vasos a demanda. La iniciativa del Ayuntamiento, entonces dirigido por el gobierno socialista de Blanca Rosa Gómez Morante -hoy en Torrelavega Sí-, seguiría funcionando de tal forma si no fuera porque, «en 2015», dichas placas dejaron de funcionar y quedaron abandonadas.
Porque han pasado siete años desde que dejaron de aprovechar la energía solar. Lo único que cogen ahora es el polvo que se acumula en el tejado del recinto deportivo, como ya denunció esta semana el portavoz de Ciudadanos (Cs) en Torrelavega, Julio Ricciardiello. «Son un mero ornamento de cara a la ciudadanía», declaró, antes de señalar que, en su lugar, el calentamiento del agua en todo este tiempo se viene haciendo con «la electricidad de red y gasoil». Paradójicamente, y en lugar de aprovechar el modelo renovable, este transitado entorno deportivo surte la actividad de sus piscinas con dos de los bienes más revalorizados en los últimos meses.
El Ayuntamiento de Torrelavega no quiere prolongar este despropósito otros siete años más y ya ha tomado medidas para evitarlo. La Concejalía de Deportes, dirigida por el regionalista Nacho González, ya se ha puesto en contacto con la empresa responsable del servicio, Enertec, para que los paneles sean «actualizados» y vuelvan a funcionar cuanto antes posible en lo alto de la construcción.
«Había averías y estamos poniendo al día las instalaciones», declaró el responsable, centrado ya en «recuperar la automatización para llevar un control de la producción de los paneles térmicos y de las salas de calderas». Una vez terminadas las labores, el municipio no tendrá que depender más de la corriente eléctrica y el gasoil que hoy nutren el inmueble. «Vamos a conseguir un ahorro en el consumo, un control de las instalaciones y toda la información necesaria de donde tenemos que actuar en el futuro para provocar ahorros».
El concejal de Deportes no es el único que quiere ver ese objetivo cumplido a la mayor brevedad. La concejalía de Asuntos Europeos y Participación Ciudadana, que dirige Bernardo Bustillo, también se volcará en mejorar este espacio energéticamente gracias a una partida europea de 400.000 euros financiada por los fondos para el Desarrollo Urbano Sostenible (Edusi).
Con todo, el recinto deportivo no será el único que se nutra de esta inversión en los próximos meses. Hay un edificio que consume más energía que ningún otro en la capital del Besaya y que el Consistorio quiere rentabilizar al máximo posible: el matadero. Hoy en día a la espera de una ambiciosa reforma de 370.457 euros, la cuadra también figura como un objetivo claro hacia la mejora de la eficiencia energética y la sostenibilidad. «La inversión se hará en ambos sitios, las piscinas y el matadero. Y no son los únicos», avanza el responsable del departamento.
Otro representante público que quiero ver los paneles funcionando lo antes posible es el portavoz de Ciudadanos, Julio Ricciardiello. «Nadie se ha preocupado en todo este tiempo», declaró ayer, indignado con ese proceso de «abandono» y, por otro lado, reacio a invertir los fondos Edusi en el matadero. Al menos de momento. «Primero hay que hacer la reforma, en la que se cambiará el tejado. No tiene sentido destinar la partida aquí», opinó el concejal centrista.
Si los paneles dejaron de funcionar en 2015, como señalan desde el equipo de gobierno y la exalcaldesa Blanca Rosa Gómez Morante, han sido dos los gobiernos que han pasado por el Ayuntamiento en estos siete años: el que lideró José Manuel Cruz Viadero, hoy concejal de Obras y primer teniente de alcalde, desde 2015 hasta 2019 (PSOE-PRC); y el de Javier López Estrada (PRC-PSOE), que dirige la ciudad en la actualidad. Será este equipo municipal el que desempolve el proyecto pendiente, aunque está por ver si las obras terminan antes de las elecciones de mayo de 2023 o si es otro gobierno el que reinaugura el sistema.
Sin mantenimiento
La responsable política que estuvo al frente de esta iniciativa hace once años, la entonces alcaldesa y hoy portavoz de Torrelavega Sí, Blanca Rosa Gómez Morante, lamentó ayer el deterioro y «abandono» que ha experimentado la adquisición que hizo el Consistorio para la piscina municipal. «Aquel era un buen modelo de gestión, pero las inversiones no se valoran», declaró, convencida de la modernización que este nuevo sistema dotaba al recinto deportivo y, vista su evolución, indignada con la ausencia de un mantenimiento que ayude a garantizar la supervivencia de este tipo de servicios en la ciudad. «Es una verdadera lástima que lo abandonaran», expresó la portavoz.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.