Torrelavega prepara su enésimo intento para reavivar la histórica Plaza de Abastos

Los diferentes intentos por parte del Ayuntamiento de Torrelavega para reavivar, sin mucho éxito, la histórica Plaza de Abastos de la ciudad no minan la moral del equipo de gobierno (PRC-PSOE). La noticia la adelantaba El Diario Montañés hace unos meses, tras –precisamente– el último tropiezo que sufrió la licitación de cuatro puestos de este núcleo comercial: la Concejalía de Ferias y Mercados ya trabaja en otro intento para revitalizar la Plaza de Abastos y sacará a subasta pública la ocupación de hasta seis puestos «a finales de este año», como anuncia la edil regionalista Cristina García Viñas.

Concretamente, la operación que plantea el Ayuntamiento consistirá en la licitación de los cuatro espacios comerciales que quedaron desiertos la última vez, en julio, más otros dos puestos –una pescadería y una charcutería– que no salen a contratación pública desde hace años. Para que se hagan una idea, será un lote de seis puestos al estilo de la licitación del pasado mes de junio, que terminó con únicamente dos de estas propuestas adjudicadas.

Hablando de estas dos últimas, el Ayuntamiento trabaja desde la semana pasada en la formalización de ambas concesiones –el 'remate' formal y administrativo para adjudicar los puestos–. En una resolución, Alcaldía resuelve adjudicar estos dos espacios comerciales, los puestos 20 y 3 de la Plaza de Abastos, fijando un canon anual de 5.040 y 1.912 euros, respectivamente.

Una vez más, el Ayuntamiento de Torrelavega vuelve a preparar una licitación para mejorar la situación de su mercado municipal, un espacio histórico fundado en 1911 y que, lejos de ser lo que fue en sus años de bonanza, no termina de reconciliarse con la Torrelavega actual ni tantos clientes como quisiera el Consistorio. Las razones que hay detrás del decaimiento pueden ser discutibles, pero no su situación ideal en pleno centro de la ciudad –con acceso tanto desde la calle Ruiz Tagle como también Serafín Escalante–.

Al menos eso es lo que cree de manera firma la concejala de Ferias y Mercados. «Es un espacio en el centro neurálgico de la ciudad, una oportunidad ideal para los comerciantes», declara Cristina García Viñas, antes de situar el impulso de la Plaza de Abastos entre los «objetivos fundamentales» de su departamento.

En los últimos años, en el mercado municipal se ha invertido tiempo y dinero con reformas, mejora de accesos, licitaciones, cambios de horario y diferentes ideas, pero ninguna de estas ha terminado de cuajar del todo. O, mejor dicho, ninguna ha dado los resultados esperados por la Administración. El Ayuntamiento lleva ya muchos años encadenando intentos para llenar el mercado –de comerciantes y de clientes–. No obstante, pasa el tiempo y sigue sin dar con la tecla.

Lejos quedan ya los años en los que la Plaza, con mayúsculas, encarnaba el ambiente y el pedigrí de las firmas locales de alimentación y el sector comercial de Torrelavega en general, un recuerdo escrito con letras de oro en la memoria de muchísimos torrelaveguenses y cántabros.

Potencial e historia no faltan. El próximo 1 de enero se cumplirán 114 años de su inauguración. Fue en 1911, tras dos años de obras para su construcción, desde noviembre de 1909, y gracias a una inversión de 95.000 pesetas. Pasados seis años del centenario, en 2017, el Ayuntamiento de Torrelavega se decidió a renovar las instalaciones mediante una intensa remodelación para hacer del mercado un núcleo comercial más moderno, dinámico y rico en servicios. Se invirtieron 214.687 euros –de los cuales 80.000 euros fueron aportados por el Gobierno de Cantabria

Y, a prácticamente dos años de que pase una década de aquella reforma, a la que siguió además una ampliación de horario para ponérselo más fácil a los clientes –de lunes a viernes en horario de mañana y tarde, así como los sábados por la mañana hasta las 14.00 horas–, la Plaza de Abastos vuelve a sumergirse otra vez en esta interminable búsqueda de inquilinos y fórmulas para adecuarse a las necesidades del momento.

Sobre esas necesidades y la importancia de ajustarse a la «realidad del momento» llegó a pronunciarse este mismo años Torrelavega Sí. Este mismo año, el partido de Blanca Rosa Gómez Morante no se mordió la lengua y expresó su preocupación por lo «escasamente atractiva» que resulta la Plaza de Abastos para el tejido comercial a día de hoy.

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