![Torrelavega recupera el proyecto de reforma de la Plaza Mayor para hacerla más accesible](https://s1.ppllstatics.com/eldiariomontanes/www/multimedia/202104/11/media/cortadas/torrelavega0409-km9-U14015038913vQE-1248x770@Diario%20Montanes.jpg)
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La Plaza Mayor lleva años sonando como espacio clave y punto neurálgico de la ciudad objeto de reforma para hacerlo más cómodo, accesible y atractivo para el ciudadano. Urbanistas y caminantes coinciden en que se trata de una plaza de paso, no de esas en ... las que hay vida en su interior y alrededor. Por ello, el Ayuntamiento lleva años sopesando la posibilidad de darle un lavado de cara para, sobre todo, lograr que sea un lugar más amable. Una plaza «con vida», que dicen.
Esta legislatura podría ser la de la Plaza Mayor ya que en los Presupuestos municipales –aprobados de forma definitiva en un Pleno extraordinario esta semana– contemplan una partida de casi un millón de euros para llevar a cabo esta actuación.
La emblemática plaza, son su templete, va a ser remodelada de forma integral esta legislatura, casi tres décadas después de la última reforma. El equipo de gobierno (PRC-PSOE) quiere que sea un espacio más abierto e integrado en un entorno que ha ido cambiando y en su mayor parte ya es peatonal. La peatonalización de tres calles en el entorno de este punto (Gilberto Quijano, Ancha y Carrera) ha convertido a la Plaza Mayor en más «abierta y accesible» y el objetivo es hacer lo mismo al otro lado, en la zona de la calle Francisco Díaz. La idea es integrar más la plaza con el entorno y hacer una obra que permita que los accesos sean más permeables, ya que el desnivel actual hace que esté casi rodeada entera de escaleras. Será una obra integral para convertirla en un espacio más limpio, diáfano, abierto y sin obstáculos.
Además, en la ciudad existen actuaciones similares de la misma época, como la remodelación de la Plaza Baldomero Iglesias, que han funcionado muy bien. En otras, como la de la Plaza de La Llama, han sido necesarias pequeñas mejoras para potenciar su uso público. En el caso de la Plaza Mayor, regionalistas y socialistas reconocen que hay que dotarla de contenido, pero también hacerla más abierta y accesible. La obra ha sido incluida en una de las diez líneas de actuación (fomento del comercio) del programa Edusi, que prevé cofinanciar (50%) en Torrelavega, antes de 2023.
Esta actuación supondría remodelar una plaza ya reformada hace 22 años y para ello existen varias alternativas que ya se plantearon en 2015. Todas ellas planteaban la peatonalización o semipeatonalización del entorno de la plaza, con el propósito de hacer del espacio más accesible y pensando en el disfrute de los ciudadanos, restringiendo el tránsito de coches. En cuanto a la plaza, la idea es rebajarla a la altura de los soportales que le rodean y respetar el templete que después de años también podría cambiar de ubicación, además de dotarla de nuevo mobiliario urbano más moderno. Alternativas que no afectarían a las calles Ancha y Carrera, ya peatonalizadas, igual que Consolación, en su último tramo. La primera alternativa es la que menos alteraría la actual fisonomía y que plantea la semipeatonalización de Francisco Díaz y Joaquín Hoyos, además de reordenar aparcamientos y otros servicios. La segunda alternativa consiste en la semipeatonalización de parte de Joaquín Hoyos y de la peatonalización de Francisco Díaz. Al mismo tiempo, se reubicaría la parada de taxis existentes en la Plaza Mayor pero se mantienen otros servicios como los aparcamientos dirigidos exclusivamente a minusválidos. La tercera alternativa conllevaría también la semipeatonalización de las calles Francisco Díaz y Joaquín Hoyos. La cuarta y última alternativa incluye la semipeatonalización de más tramos de la calle Joaquín Hoyos y también la peatonalización de Francisco Díaz, hasta las proximidades de la Plaza de La Llama.
La Plaza Mayor, antes denominada Gilberto Quijano, ha sido escenario de diversas remodelaciones a lo largo de su ya dilatada historia. La última de ellas, no exenta de críticas con varias de las anteriores, tuvo lugar en los primeros años de la década de los noventa del siglo pasado. Concretamente, se inició en septiembre de 1992 y concluyó cinco meses después. La obra supuso una inversión de 65 millones de pesetas y permitió recuperar el tradicional templete, pero esta vez en un lateral de la plaza en lugar del centro. El proyecto también incluyó otro elemento llamativo: una fuente ornamental con una cascada.
De la Plaza Mayor apenas se volvió a hablar hasta que más de dos décadas después, en abril de 2015, el entonces concejal de Urbanismo, José Otto Oyarbide, presentó un ambicioso proyecto de remodelación con cuatro alternativas, encaminadas todas ellas a crear una plaza sin escaleras rodeada de espacios peatonales, una inversión valorada en 1,3 millones de euros que no se llegó a realizar. Sí se han ejecutado en los últimos años varias obras de peatonalización en el entorno de la Plaza Mayor.
La última de ellas se llevó a cabo en las calles Gilberto Quijano, Ancha y Carrera, que quedaron conectadas con otros viales del centro urbano en los que el peatón tiene prioridad y permite la comunicación peatonal con La Llama.
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Ana del Castillo
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