Turismo y Obispado sellarán un convenio de 193.000 euros para rehabilitar La Asunción

Porque los signos de la edad ya son visibles en algunos elementos de la catedral. El estado de la pintura y las vidrieras son las dos actuaciones principales que subraya el párroco Juan Carlos Rodríguez del Pozo, volcado en la restauración del que define como uno de los «emblemas» de la ciudad. «Es una referencia», pondera el cura, antes de enumerar otras renovaciones que son «necesarias» en la iglesia, desde el «obsoleto» sistema de calefacción hasta los dispositivos de luz y sonido llamados a dinamizar la actividad eclesiástica. «Hay que actualizarla al siglo XXI», convoca el responsable.

El borrador del convenio, que la Consejería ya ha enviado a la Diócesis santanderina, nace precisamente para dar respuesta a estos trabajos pendientes. El consejero es consciente del valor que, más de un siglo de historia e implicación social después, posee este templo de estilo neogótico, «uno de los elementos más significativos del patrimonio cultural torrelaveguense», como destaca a colación del acuerdo.

De ahí su papel dentro del itinerario diseñado por el Gobierno de Cantabria en el marco del Camino Lebaniego y la recepción de peregrinos en general -un nicho turístico en el que el consejero viene empeñando muchos de sus esfuerzos desde que tomó los mandos del departamento-. La Asunción tiene un espacio reservado en esa ruta, y López Marcano no quiere desaprovechar la ocasión de «conservar» un «símbolo del Patrimonio» dentro del Plan Xacobeo 2021-22: «Torrelavega es un cruce de caminos entre los destinos turísticos de la comunidad y tiene que tener una oferta propia a desarrollar en el conjunto del destino Cantabria».

Hasta hace unos meses, muchas de esas esperanzas estaban depositadas en ese proyecto del Ministerio de Turismo, una partida idéntica en fondo y forma pero que terminó siendo inadecuada para las aspiraciones de rehabilitar la iglesia. ¿La razón? Una incompatibilidad de la prestación con el carácter beneficiario de la institución católica. Las palabras del secretario de Estado de Turismo, Fernando Valdés, hace un año, jamás llegaron a traducirse en un céntimo para una parroquia que, desde su fundación en 1901, encarna más de 120 años de historia y labor social alrededor de la capital del Besaya.

Cerca de doce meses después de aquellas promesa, la Consejería que hoy dirige el exalcalde de Torrelavega ha decidido asumir los costes de estas reparaciones. Y no es la primera vez que López Marcano decide sufragar este tipo de labores en colaboración con la Diócesis de Santander. Ya en enero de este año, su Consejería suscribió un acuerdo con la Iglesia para mejorar el edificio del monasterio de Santo Toribio de Liébana y su entorno mediante unas obras valoradas en hasta medio millón de euros.