Quemando rueda por las calles de Torrelavega

Ya desde lejos se escucha el sonido que emiten las motocicletas. Unas 50 personas esperan la llegada del resto de compañeros con la excusa de juntarse para salir a dar una vuelta y disfrutar de sus respectivos 'juguetes'. Las motos son de diferentes marcas y cilindradas, pues no todos forman parte del club organizador, aunque el modelo Burgman de la marca Suzuki se repitió entre las muchas opciones elegidas. Los cascos y monos aportaron un variado colorido. La edad de los presentes, del mismo modo, fue muy dispar. Jóvenes y mayores, en solitario o acompañados, fueron partícipes del único de los eventos relacionados con el motor que se recoge en la presente edición de La Patrona, que termina hoy, domingo.

La subida del carburante no fue un obstáculo para que estos entusiastas siguiesen compartiendo su pasión. Una afición que les resulta más cara en los últimos tiempos. Sin embargo, nadie pareció reparar en ese detalle durante la jornada. Es más, algunos como Serafín participaron por primera vez: «Nunca había formado parte de esta concentración. De hecho, ni siquiera tengo muy claro el recorrido. Yo seguiré a los organizadores. Vengo a pasarlo bien y a disfrutar del día, que por suerte ha salido bonito», aseguró minutos antes.

Óscar Carral, que fue uno de los primeros en enfilar la carretera, describió el recorrido una vez atravesada la ciudad: «Bajaremos ahora por el ferial al auditorio y cruzaremos Torrelavega. Después saldremos por Barreda, Viérnoles y toda esa zona de los alrededores, Torres... Pasaremos por Cartes, Collado de Cieza e iremos más afuera», adelantó.

Sesenta kilómetros esperaban a los moteros, que tomaron dirección Los Corrales de Buelna, pasando también por Arenas de Iguña, San Vicente de Toranzo y vuelta por las Hoces dejando a algunos menos equipados o con el depósito más vacío por el camino.

Después de preparar 11 paelleras en la jornada del viernes para el Día de las Peñas, con capacidad para despachar alrededor de 2.500 raciones, las hijas de Gelín trasladaron sus equipos del Parque de Miravalles al auditorio del Parque Manuel Barquín, donde prepararon la comida para los moteros una vez que estos completaron su paseo. Una vez más, «hay arroz para cargar un barco», aseguraron, ya que estaban dispuestos a servir 300 raciones en un parque en el que quedaron no más de la treintena de los que empezaron el recorrido.

Reuniones y eventos

El Moto Club Burgman Cantabria forma parte del grupo selecto de cuadrillas que, ya antes de la primera Liga de Peñas 'Somos '39300' que tanto ambiente y colorido están dando a esta edición de La Patrona, planteaba diferentes reuniones y eventos. «Llevamos 29 años en la mesa de peñas colaborando con el Ayuntamiento. Exceptuando la pandemia, todos los años hemos realizado actividades, lo que viene a reflejar a las claras la implicación que tiene este club con la ciudad», mencionó Carral antes de recorrer los barrios y calles. De hecho, antes de dar el pistoletazo de salida a esta concentración, los motoristas ya habían tenido presencia en jornadas anteriores de las fiestas: «Ya hemos hecho la salida de gigantes y cabezudos. Mañana tendremos la Gala Floral y el Baratillo Solidario», apuntó uno de los organizadores.

En una edición de las fiestas en las que la participación ha aumentado de manera exponencial, en el Moto Club Burgman abren sus puertas a todos los interesados en adherirse: «No importa la edad, ni la experiencia o la marca de moto que conduzcas, tan solo la pasión por este mundillo». Solo te tiene que apasionar el sonido de los motores.