«Algo vamos a hacer, aunque no sean fiestas»

Sin embargo, y después de que el Ayuntamiento, desde la Concejalía de Festejos, haya intentado hasta última hora diseñar un programa adaptado a las circunstancias, este año no podrá ser. El covid-19 se ha llevado por delante las fiestas de La Patrona 2020 y «por responsabilidad» y «por unanimidad» la Corporación municipal ha decidido cancelar las fiestas. Solo queda en pie del programa tradicional la misa -con medidas y aforo reducido- y el concurso de pintura al aire libre. No hay pregón, ni chupinazo de confeti. En su lugar este año, como novedad, se abre el Teatro Municipal Concha Espina para durante diez días actúen bandas locales y este sábado y domingo los integrantes de las peñas de la ciudad repartirán polkas por calles y plazas de la ciudad para que vecinos y visitantes no se olviden de que «estamos en fiestas, sin actos no festejos multitudinarios, pero fiestas».

Los participantes activos y con más tradición en el programa de fiestas de Torrelavega no renuncian a celebrar «en la medida de lo posible». El Diario Montañés ha reunido a representantes de cuatro de estas agrupaciones culturales y artísticas más representativas que cada año con sus distintas actividades hacen que el público disfrute de sus espectáculos. Toman la palabra para hablar de este año «especial», marcado por la pandemia y que ha hecho que la capital del Besaya se quede sin sus fiestas, referente en no solo en la comarca sino en toda la región. Son la peña Sociedad Deportiva de Pesca El Tolle -organizadora del concurso de tortillas- y la peña Club Cántabro de Campismo -organizadora del concurso de arroz-, laAgrupación de Danzas Virgen de las Nieves de Tanos y la compañía Malabaracirco.

Todos ellos lamentan la suspensión de las fiestas pero reconocen que ha sido la mejor decisión que se podía tomar «porque dadas las circunstancias no se pueden asumir riesgos».

En este sentido, respaldan la decisión del Ayuntamiento aunque desde algún sector como es el caso de Javier Amigo, coordinador de Malabaracirco -compañía que gestiona la escuela de circo en la ciudad-, que considera que «se podía haber diseñado alguna propuesta cultural y artística adaptada porque aunque entendemos que la prioridad es la cuestión sanitaria, precisamente el arte y la cultura, aunque sea en pequeñas dosis, nos puede ayudar a sobrellevar esta situación y este año tan extraño en el que nos encontramos». «El sector cultural ya venía tocado antes de la crisis del coronavirus y mientras otros sectores van recuperando la actividad parece que nosotros nos quedamos atrás y solo hay alguna propuesta puntual como ha hecho el Gobierno de Cantabria con el ciclo de La Cultura Contraataca. Entendemos que la situación no está para fiestas pero creemos que se puede diseñar desde los ayuntamientos un plan de choque que ayude a subsistir a todos esos profesionales que viven del espectáculo, el ocio y la cultura, que sin duda van a salir aún más tocados tras esta crisis», agrega.

Enrique Mantecón, presidente de la Sociedad Deportiva de Pesca El Tolle, la peña que desde hace casi cuarenta años organiza el concurso de tortillas, dice que ve «normal» que las fiestas no se celebren este año porque «el bicho está ahí fuera, en la calle, y no nos podemos arriesgar». Además en el caso de esta agrupación cultural y deportiva la resignación «este año es doble» porque «tampoco hemos podido celebrar los concursos de pesca deportiva, que sobre todo sentimos por los más pequeños del colectivo». Sin embargo, Mantecón -como se le conoce en la ciudad- se muestra convencido de que «alguna cosa haremos aunque no sean fiestas, porque lo que se trata es de celebrar y de estar juntos». Mientras, apunta que ya están pensando en el año próximo y en una nueva edición del concurso de tortillas, que cada año congrega a centenares de participantes en la plaza Baldomero Iglesias. «Tengo 63 años y no recuerdo que se haya suspendido antes pero ahora con el covid-19 entendemos la situación y consideramos que se ha hecho lo adecuado desde el Ayuntamiento. Otra vez será», afirma mientras confiesa que «aunque no lo creas no he hecho una tortilla de patatas en mi vida». Y recuerda, que esta año la peña celebra su 60 aniversario por lo que «si el coronavirus lo permite, algo haremos».

En el seno de otra de las peñas tradicionales de Torrelavega, el Club Cántabro de Campismo, y que preside Satur Fernández, también hay resignación general con la anulación de las fiestas. El máximo responsable de la agrupación que cada año por la Patrona organiza el concurso de arroces dice que después de más de dos décadas con los fogones listos para el certamen «este año se nos va a hacer muy raro que llegue el fin de semana y no tengamos nuestra fiesta». «Antes lo hacíamos en el parque Manuel Barquín y también bajo los soportales de la Plaza Mayor pero los últimos años lo hemos hecho en la plaza de La Llama, a cubierto, por si acaso, pero este año no hay cubierta para el coronavirus y nos toca celebrar de otra manera», apunta.

Una alternativa que ha puesto a disposición de los integrantes de las peñas el Ayuntamiento es el reparto gratuito de polkas en distintas rotondas de la ciudad durante este sábado y domingo. «Nos lo han ofrecido para que los asociados de las peñas podamos repartir este dulce típico de la ciudad a aquellos que nos visiten estos días, porque aunque no haya programa de actos, estamos en fiestas, y así se lo queremos hacer ver», agrega.

Pero si de tradición se trata la Agrupación de Danzas Virgen de las Nieves de Tanos, que dicen que ya bailó para Carlos V allá por el año 1517, es uno de los fijos en las fiestas. Tendrán el privilegio de bailar hoy tras la misa de la Virgen Grande, aunque como dice una de sus bailarinas, María del Carmen Cerro Olarreaga, «es un año muy raro ya que a estas alturas ya me hubiera puesto unas ochenta veces y sin embargo ahora... En ese sentido estamos un poco desanimados porque para todos nosotros es un honor y un privilegio bailar en La Patrona, pero esperemos que lo hagamos en 2021».