Carlos Fidalgo gana el Tristana con la novela 'El agujero de Helmand'

«Concisión, amenidad, eficacia narrativa, profundidad, redondez formal». Pero, sobre todo, «actualidad». La obra 'El agujero de Helmand', del periodista y escritor Carlos Fidalgo Calvo, merece tales calificativos. La nueva narración que llevará el nombre de Tristana para la historia es una gran novela a juicio del jurado. El acta reflejó la unanimidad de la decisión pero los escritores, periodistas y críticos, que valoraron los originales y emitieron ayer el fallo, mostraron el sentir coincidente de que el premio santanderino incorporaba a su trayectoria a un excelente autor con una crónica fantástica de enorme personalidad. El periodista y escritor leonés ha obtenido así el Premio Tristana de novela fantástica, cita bienal del Ayuntamiento de Santander, a través de su Concejalía de Cultura, que tras cinco ediciones y diez años ha vuelto a reflejar su consolidación y prestigio.

La historia ganadora, con una profunda atmósfera de terror, es una narración enmarcada en la guerra de Afganistán y centrada en un pelotón de soldados. Situaciones límite, símbolos y metáforas sobre el encuentro entre Oriente y Occidente y un clima fantástico y de terror envuelven 'El agujero de Helmand', novela que desprende desasosiego, incertidumbre y ansiedad. El jurado lo integraron los escritores José María Merino y Juan Pedro Aparicio, la periodista Blanca Berasategui, el crítico José Manuel Cabrales Arteaga y el catedrático Dámaso López García.

El certamen de carácter bienal y de rango internacional, abierto a todos los escritores de habla española, es el único concurso de carácter institucional especializado en el género fantástico, que tan rico historial tiene en países como Argentina y Colombia. La dotación del premio asciende a 10.000 euros, y la publicación de la novela corre a cargo de Ediciones Menoscuarto, que destaca particularmente en el ámbito de la narrativa breve. En la presente edición han concurrido 99 novelas, de las cuales fueron admitidas 80. Entre las finalistas destacó la presencia de dos novelas argentinas y una, 'Xan Irmandiño', de autora santanderina.

Demonios

Los miembros del jurado, presidido por Juan Pedro Aparicio, el concejal de Cultura, César Torrellas y el responsable técnico del servicio municipal de Cultura, Enrique Alvarez, alabaron la crónica fantástica ambientada en Kabul que ha merecido el galardón de este año. En la edición anterior, hace dos años, el ganador fue el escritor Andrés Ibáñez por 'Memorias de un hombre de madera'. Aparicio señaló que el autor premiado consigue «crear, con pocas palabras, un clima de ansiedad, incertidumbre y terror».

Enrique Alvarez, escritor, artífice de la organización del premio desde la Concejalía, subrayó la «gran presencia» que ha tenido el demonio en las novelas presentadas a esta edición.

Fidalgo (Bembibre, León, 1973), que ya fue finalista en la tercera edición de este premio, es periodista de 'El Diario de León', ha trabajado en la Agencia Efe en Madrid y ha publicado el libro de relatos 'El país de las nieblas'. También fue finalista de las últimas ediciones del premio Tiflos de la ONCE y del Premio Internacional Max Aub.

A juicio del jurado, la historia comienza como una crónica periodística para convertirse, a medida que avanza el relato, en «una gran novela fantástica y de misterio». Blanca Berasategui confesó que en ningún momento dudó que la novela premiada era obra de un «buen periodista porque su arranque parece una crónica enviada desde Kabul por un auténtico reportero».

El presidente del jurado sostuvo que el premio está «más que consolidado» y además los originales llegan desde «todo el mundo hispánico, por lo que existe ya un 'molde Tristana'». Aparicio resaltó «la calidad de las obras, que se ha ido manteniendo desde la primera convocatoria, aunque con algún altibajo, que nunca se ha producido entre las finalistas, lo que hace que la pelea por el premio esté siempre muy disputada».