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N. G. U.
Miércoles, 26 de enero 2011, 09:52
El alcalde de Campoo de Yuso, Eduardo Ortiz (PRC), incurrió en «desviación de poder» cuando, hace dos años, destituyó al secretario del Concejo Abierto de Servillas, Nodier Sagarna, según el fallo hecho público ayer por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Santander, que considera «injustificada» una decisión con la que el regidor pretendía «dar satisfacción» al teniente de alcalde, David Saiz Díaz, (quien no tenía buena relación con Sagarna) y ha anulado el cese.
En el fallo, la jueza, que subraya que el regidor «no ha aportado motivo alguno válido para tomar esa decisión», recuerda que, conforme a la Ley de Entidades Locales Menores, el secretario de una junta vecinal o de un concejo abierto es un cargo de confianza del secretario del Ayuntamiento, que puede delegar parte de sus atribuciones en un funcionario o en una persona propuesta por la propia junta o asamblea vecinal.
La juez admite que, puesto que se trata de un cargo de confianza, para destituir a la persona que lo desempeña basta con que haya perdido la confianza de quien lo nombró. Pero también recalca que, aunque la motivación que se exige para cesar a un cargo de confianza es mínima, eso «no significa que se obvie por completo, que es lo que sucede en la resolución» del alcalde de Campoo de Yuso recurrida en este pleito.
Las sentencia explica que, durante la tramitación del recurso, el Ayuntamiento ha tratado de alegar que el secretario de Servillas fue cesado «por falta de competencia», pero sin aportar «dato alguno que corrobore» tal afirmación.
De hecho, la juez asegura que «parece que de quien ha perdido la confianza el recurrente no es del señor secretario, sino de su vecino, el señor Saiz Díaz», en alusión al teniente de alcalde y número dos del grupo regionalista.
En este sentido, el Juzgado recuerda que existe la constancia de que se presentaron denuncias ante la Guardia Civil «por la actuación del señor Saiz frente a la esposa del recurrente, este mismo y otros vecinos del pueblo» de Servillas, «en las fechas inmediatamente anteriores» a que el teniente de alcalde de Campoo de Yuso solicitara la destitución de Sagarna.
La juez añade que este último dato ha sido corroborado por varios testigos y «obliga a considerar» que la destitución del secretario de Servillas no fue razonable, sino que «se ha adoptado para dar satisfacción a un vecino (Saiz), de cuya aseveración no se ha realizado labor de investigación alguna».
«Nos hemos equivocado»
Puesto al corriente del fallo judicial, el alcalde de Campo de Yuso, Eduardo Ortiz, reconoció que tanto él como el secretario del Ayuntamiento incurrieron en «una equivocación» cuando trataron el cese de Sagarna «porque no lo hicimos como debíamos». «Efectivamente, no era a mí a quien correspondía tomar esta decisión», admite Ortiz, que también asume la sentencia («total, para lo que queda de legislatura...») pero puntualiza que desde la destitución de Sagarna «la situación se ha regularizado».
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