![Soy alérgico al gato, ¿qué hago?](https://s1.ppllstatics.com/eldiariomontanes/www/multimedia/202207/12/media/cortadas/alergias_601-kWR-U17069976824988G-624x385@RC.jpg)
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Isaac Asenjo
Madrid
Jueves, 1 de septiembre 2022, 00:03
Estornudos, moqueo, picor de ojos y garganta, incluso dificultad respiratoria. Me sucede en cualquier estación del año y los síntomas empeoran al estar en casa... sobre todo cuando tengo cerca al gato. Antes no lo notaba tanto, pero desde hace unos meses la cosa ha ... empeorado. ¿Qué hago? Lo primero, consultar con un alergólogo.
Un 9% de los adultos europeos está «sensibilizado» a la caspa de los animales y esta cifra aumenta hasta el 27% si, además, la persona sufre alergia respiratoria, según recoge el Libro de las Enfermedades Alérgicas, publicado por la Fundación BBVA y elaborado por la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC). «El pelo, en contra de lo que piensa la mayoría de la gente, no es la causa de la alergia. Está ocasionada por proteínas que se encuentran en la saliva, la orina y en la caspa que se desprende de la piel del animal y que se dispersan en el medio ambiente. Son responsables de causar los síntomas de rinoconjuntivitis, asma, urticaria de contacto e, incluso, de anafilaxia», explica Manuel De Las Heras Gonzalo, médico especialista en alergología de la Fundación Jiménez Díaz.
Entonces ¿la solución pueden ser las razas hipoalergénicas? «Son más un reclamo comercial que otra cosa, ya que para crear razas así deberíamos utilizar la ingeniería genética para eliminar esa proteína que causa la alergia en el ADN del perro», explica el psicólogo especialista en comportamiento animal Nacho Sierra. Y da una orientación: «Los animales de pelo corto tienen menos elementos para que esa proteína viaje de forma volátil, ocurre lo mismo con los de pelo duro y tipo lanoso o rizado, como los perros de aguas, con los que se reducen la posible de reacción alérgica».
Perros y gatos, los animales domésticos más habituales en los hogares –hay 5 y 3 millones, respectivamente en nuestro país–, son una causa frecuente de enfermedad alérgica respiratoria. Y la prevalencia va en aumento en todo el mundo. «Evidentemente, la mayor presencia de mascotas en las casas –habitan en un 40% de los hogares españoles– provoca una mayor exposición y, por tanto, una mayor probabilidad de desarrollar alergia», expone Manuel Lázaro, vocal del Colegio de Veterinarios de Madrid. Aunque advierte de una circunstancia: «Una revisión de artículos publicados recientemente sugiere que la exposición temprana a los gatos y a los perros es probable que proteja del desarrollo posterior de enfermedades alérgicas».
¿Cómo se diagnostica la alergia a mascotas? «De la misma manera que ocurre con otro tipo de alergias, existen varios métodos diagnósticos: pruebas cutáneas y la determinación de anticuerpos IgE en el suero de los pacientes frente a los alérgenos de los animales sospechosos», aclara Álvaro Amo Vázquez de la Torre, especialista en alergología en la Clínica Amo Salud y miembro de Top Doctors.
Si efectivamente soy alérgico a estos animales... ¿debo desprenderme de mi mascota? Lo más efectivo es evitar tener animal, claro. Pero si se quiere seguir manteniéndolo en casa –hay que tener en cuenta el componente emocional– «habría que implantar unas medidas higiénicas muy estrictas como bañar al animal con regularidad, evitar que la mascota colonice su dormitorio o colocar purificadores de aire con filtros HEPA», propone soluciones Vázquez de la Torre. «También se podría plantear una vacunación antialérgica. Las vacunas tienen una duración de 3 a 5 años, y lo que hacen es enseñar al sistema inmunológico que el alérgeno de los animales no es perjudicial para que no provoque una respuesta alérgica (que sería una respuesta errónea)».
El especialista no aconseja el cambio de mascota a otro mamífero, ya que, si una persona está sensibilizada a una especie, es bastante probable que termine por sensibilizarse a otras. «Aunque no habría problema en caso de cambiar, por ejemplo, a reptiles, anfibios, peces...». La inmunoterapia con alérgenos de animales debe considerarse en personas alérgicas en las que la exposición a animales es inevitable.
Otra de las soluciones son los productos tópicos –aquellos que se aplican a las superficies del cuerpo– para las mascotas. «Al reducir la descamación y compactarla para evitar que sea tan volátil son una buena ayuda para evitar los alérgenos», sugiere Lázaro.
Al margen de perros y gatos... ¿hay otros animales que provoquen alergia? –en España hay 22 millones de mascotas domésticas– «Sí. Existen alergias a las aves que ocasionan problemas respiratorios y, en menor medida, a anfibios o reptiles como iguanas y lagartos, pero son casos más excepcionales», señala Vázquez de la Torre. También se plantea este problema con «roedores y caballos», añade el veterinario Manuel Lázaro.
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Ana del Castillo
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