Cómo estrenar septiembre y organizar tus planes de emprendimiento

Los expertos en estos temas dicen que esta época es el momento en el que nos fijamos los objetivos más ambiciosos, y a la vez, el momento en el que con mayor velocidad los abandonamos. Y el sentido común nos dice que las garantías de éxito en el logro de lo que nos proponemos no dependen de la fecha del calendario.

Y entonces, ¿qué puedes hacer para estrenar septiembre de la mejor forma posible en tu emprendimiento? La respuesta es sencilla: cambiar tu mentalidad, desaprender eso que no ha funcionado en años anteriores y darte la posibilidad de hacer las cosas de otra forma, aunque eso no sea lo que «se supone que deberías estar haciendo» o no se parezca mucho a lo que todo el mundo muestra en redes sociales.

En primer lugar, aprovecha lo mejor de la energía de esta época y márcate un 'folio en blanco' en tus objetivos para la recta final de 2021. Bloquéate un tiempo para ti, búscate un sitio que te haga salir de tu lugar habitual de trabajo y plantéate cómo quieres que sea tu emprendimiento a partir de ahora.

No te plantees si a día de hoy tienes la capacidad de hacerlo, los recursos o el tiempo para ello: decide qué quieres lograr, aunque todavía no tengas claro cómo lo vas a lograr. Al fin y al cabo, de eso va emprender, y estás en un momento genial para decidir qué nuevos productos o servicios quieres lanzar, qué nuevos límites quieres poner, qué tipo de clientes deseas tener, o cuál quieres que sea la relación con tus clientes y proveedores, entre otros temas importantes.

En segundo lugar, aprovecha la perspectiva que te ha dado el hecho de salir del ritmo intenso del día a día y elige calidad frente a cantidad. No va de tener tres vidas al mismo tiempo para terminar todas tus listas de tareas y reuniones pendientes, sino de enfocarte para poder profundizar de verdad… aunque eso implique decir «no» a otras cosas.

Para ello, elige un proyecto o un área de tu negocio en el que quieras ir realmente «a fondo». Bloquea ya mismo un tiempo para ello a diario y prepárate para ver cómo has evolucionado y los resultados que estás consiguiendo a final de año. No hace falta que sea demasiado tiempo, con media hora diaria asignada a ese proyecto vas a despedir diciembre habiendo dedicado casi 40 horas a ese tema, ¡no me digas que no pagarías ahora mismo por tener esa bolsa de horas para tu emprendimiento!

Y como emprender es una súper carrera de fondo en la que muchas veces se nos olvida lo importante que es descansar y volver a cargar pilas, recuerda lo bien que te ha venido hacerlo este verano y no esperes al siguiente para desconectar. Tráete la energía del verano a tu día a día, márcate un horario de fin de tu jornada siempre que puedas y recuerda que ser tu propio jefe no se puede convertir en «ser tu peor jefe».

Descansar también es parte de tu trabajo y hacerlo antes de quedarte sin batería es lo que te va a permitir llegar más lejos y ser mucho más rentable en tu emprendimiento, ¡feliz septiembre y recuerda que aún quedan días de verano para disfrutarlo!

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