Descubre al «sombrerero loco» y favorito de los famosos
VIVIR LA MODA ·
Gorka González, un donostiarra de 37 años, ha recuperado un oficio casi olvidado desde su pequeño taller, en el que confecciona piezas únicas que han adornado las cabezas de Marta Hazas, Nieves Álvarez, Sara Carbonero, Miguel Ángel Silvestre o Mikel Erentxun
VIRGINIA MELCHOR
Miércoles, 3 de febrero 2021
Gorka González, un apasionado de las películas del Oeste, buscaba un sombrero como los que llevaban los antiguos vaqueros, pero no había forma de encontrarlo. «Sólo podía conseguir uno en Estados Unidos y me costaba 3.000 euros», recuerda. Por eso, decidió que se ... lo haría él mismo, que se convertiría en sombrerero y, además, a la vieja usanza casi olvidada. Primero cursó un grado de Patronaje y Confección Textil para adquirir los conocimientos necesarios y, después, buscó en las sombrererías más típicas de España alguien que le pudiese enseñar el oficio. «Me di cuenta de que era una profesión obsoleta, las nuevas generaciones no estaban continuando con ella», lamenta.
Hoy confecciona en su pequeño taller, ubicado en el barrio donostiarra de San Roque, los sombreros que visten las cabezas de famosos como Marta Hazas, Sara Carbonero, Nieves Álvarez, Mar Saura, Miguel Ángel Silvestre o Mikel Erentxun, que ya han caído rendidos a sus diseños únicos hechos a medida. Su ilusión y ganas por recuperar un oficio perdido le impulsan a salir adelante «en una sociedad uniformada» en la que «pocos se atreven a marcar la diferencia». Reconoce que él también está loco, como el Sombrerero de 'Alicia en el País de las Maravillas', pero admite que la suya es una locura feliz. «Hago a la gente los sombreros que yo quise llevar y nadie me los pudo hacer porque en las sombrererías me decían: 'Nosotros ya no hacemos sombreros. Los vendemos'», asegura
El creador tardó «mucho, mucho tiempo» en conocer a un hacedor de sombreros, lo que se conoce como 'hatmaker'. Lo encontró en Vitoria. Fue Charly, cuarta generación de sombrereros de Casa Alocen, en la calle General Álava, quien compartió con este joven de 37 años su sabiduría y herramientas para que pudiese iniciarse en este oficio. «En cuanto cruzamos unas palabras, surgió una conexión muy especial, rápidamente me invitó a pasar a su taller y... ¡ahí estaban todas esas herramientas que yo necesitaba! Tenía conformadores, hormas de nogal, aros, cortadores de ala, mesas de trabajo técnicas.. ¡todo un universo que ya no existía! Charly estaba a punto de jubilarse y le hizo mucha ilusión que yo continuara con el negocio dándole una vuelta de tuerca», relata Gorka.
De la mano de su mentor, dio sus primeros pasos en este oficio, pero su ascensión llegó cuando en un viaje a Madrid conoció a Valero Rioja, uno de los fotógrafos de moda más reconocidos de nuestro país. «Le gustó mucho mi trabajo y me compró un sombrero para que lo llevase la 'influencer' María Pombo en una editoral de una revista», cuenta el sombrerero. Desde entonces, sus piezas únicas han adornado las cabezas de modelos, actrices o cantantes en numerosas publicaciones.
Sara Carbonero y su original sombrero
De hecho, el pasado mes de noviembre, las periodistas Sara Carbonero e Isabel Jiménez, amigas íntimas y socias, protagonizaron la portada de la revista 'Mujerhoy' luciendo ambas un sombrero diseñado por Gorka para la ocasión. «Me dijeron que debían ser de estilo 'boho chic' y confeccioné uno para Isabel en un tono borgoña y otro para Sara en un gris acero», desvela. La periodista deportiva también eligió para dar un paseo por el campo durante sus vacaciones navideñas, un diseño creado por este artesano vasco que ocultaba un original detalle en la copa: una diminuta llave. Sin duda, un modelo muy especial adornado con plumas y que Sara combinó con unos vaqueros, un jersey marrón claro, una bufanda con estampado y un abrigo XL en color beige. «El sombrero de la llave fue una pieza que diseñé para Sara y seguro que pronto le vemos algún otro modelo mío», apunta.
El principal objetivo de este artista hecho a sí mismo es recuperar técnicas artesanales que se están perdiendo para confeccionar sombreros con carácter exclusivo y sin fecha de caducidad, que puedan heredar varias generaciones. «Trabajo con fieltros de mucha calidad y de origen natural, badanas de cuero con el sello 'GG' estampado, forros internos... Estoy en una constante búsqueda de objetos y telas que hacen cada pieza única», asegura. Sus diseños cuestan 450 euros y se pueden encargar a través de su página web o contactando con él en su perfil de Instagram. Eso sí, antes de confeccionar cada sombrero, necesita hablar con la persona que lo va a llevar para «meterse en su cabeza y dar en el clavo». «Una vez que conozco su talla y ha elegido el color, tengo que saber cómo es el cliente, a qué se dedica, para qué lo quiere... para dar con la pieza perfecta», explica. Gorka defiende desde su pequeño taller un oficio artesanal que está desapareciendo y, además, lo hace con una pasión que es para quitarse el sombrero.
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