Hoy aprendemos a hacer en casa tartar de salmón

Ya hemos hablado muchas veces de las propiedades del salmón, es un pescado azul, rico en ácidos grasos Omega 3 y Omega 6, que contribuye al crecimiento y reparación de los tejidos del cuerpo, y, además, ayuda al desarrollo del sistema nervioso y regula los niveles de calcio.

Para hacer nuestro tratar vamos a necesitar estos ingredientes, que los podemos adaptar al gusto de cada uno.

-400 gramos de salmón en un lomo sin piel y sin espinas.

-1 cebolleta fresca, 50 gramos de pepinillos encurtidos,

-1 cucharada de mayonesa de kimchee y

-1 cucharada de salsa de soja.

Necesitamos que el pescado sea lo más fresco posible. Picamos el salmón en cubos con ayuda de un cuchillo muy afilado, para no machacar el salmón sino cortarlo; es más fácil si lo fileteáis primero, después lo cortáis en tiras finas y, finalmente, picáis las tiras en pequeños trozos de 1'5 centímetros, no más pequeños. Si el salmón está ligeramente congelado, la operación se hace mucho más fácil, aunque no es necesario. Lo que sí que tenemos que picar pequeños son la cebolleta y los pepinillos, ya que acompañan pero sin hacerse notar.

Enfriamos un bol –si podemos, en el congelador– unos 20 minutos y lo utilizamos para preparar el tartar. Añadimos la mayonesa, la soja, la cebolleta y el pepinillo, removemos bien mezclando e integrando todo y añadimos el salmón. Le damos un par de vueltas y lo metemos rápidamente a la nevera.

Para acompañarlo a mí me gusta mucho, además de las clásicas tostas de pan, con las que al margen de un soporte, aportan un toque crujiente al bocado. También podemos darle un toque diferente, también crujiente, con el clásico pan de gambas, también llamado 'keropok', que es muy utilizado como aperitivo en la cocina china. Se trata de una pasta elaborada con almidón de yuca o de patata saboreada con pasta de marisco o pescado y agua. Lo freímos con aceite bien caliente hasta que sufle y lo sacamos a un papel absorbente para que escurra el exceso de aceite.

Montamos una cucharadita de tartar encima de cada pan de gambas y lo servimos rápidamente para que no se nos ablande.

Es fundamental el frío en éste plato, sobre todo en el tartar, al que podemos acompañar también con un poco de aguacate y cebolla frita o semillas de sésamo tostado, así como hierbas frescas como el eneldo que va genial con el salmón. Es un bocado nutritivo, fresco y ligero, perfecto para compartir en estos días de tanto calor.