Mermeladas cántabras de frutos de la huerta, en conserva para todo el año

Begoña de Burgos López, arquitecta, lanzó Finca Socuevas en 2018, en Cabezón de la Sal. Anteriormente, en 1990 había adquirido una extensa finca en Cades (Herrerías). Allí, apasionada por el campo y la cocina, comenzó a plantar, recolectar y preparar productos gourmet, en un obrador propio. Según ella misma señala «hay que hacer del tema saludable, incluso de las dietas de adelgazamiento, algo gourmet, algo buenísimo». Además, «somos una empresa familiar, con dos hijas súper implicadas, y pretendemos dar visibilidad a este valle».

Finca Socuevas elabora una importante cantidad de productos aunque destacan sus mermeladas (hechas con fructosa), fabes (con una producción pequeña pero que se vende rápidamente), nueces, tila, salsas dulces y picantes, crema de marrón glace y cabello de ángel. Todas, además, con un toque de limón de la misma finca. Una conserva nueva es la del tomate rosa frito.

Estos productos se pueden conseguir, además de en la Finca Socuevas, en el Club del Gourmet de El Corte Inglés, las dos tiendas Diferente de Santander y pastelería Muné. En Comillas y San Vicente de la Barquera, en Aramburu, en el restaurante Cofiño (Caviedes), en Zaballa (Cabezón de la Sal), Carnicería de Eduardo (Puente Nansa) y en Casa Jandro (Celis), donde se preparan postres con sus mermeladas y se venden dos de estos productos.

El ingeniero Gonzalo Noriega, después de varios años trabajando fuera de Santander, su ciudad natal, regresó a Cantabria en 2013, donde, de alguna forma, decidió cambiar de vida. Un año después, adquirió una finca en Liérganes donde comenzó a plantar arándanos, al tiempo que levantaba una pequeña fábrica para sacar un rendimiento al producto elaborado.

Noriega pronto se dio cuenta de que el arándano en fresco es muy difícil de vender, «es un producto muy perecedero al que hay que dar salida rápidamente y además el mercado está en mano de los intermediarios». Así, se decidió a elaborar sus propios productos, comenzando con la mermelada natural. Después lanzó cuatro nuevas variedades, totalmente desconocidas, (con vainilla, orujo, canela y menta). Con los meses de confinamiento surgen dos especialidades más: arándanos en almíbar y zumo natural sin azúcar.

Destaca Gonzalo Noriega que en la 'moda del arándano' en Cantabria tuvo bastante que ver el Gobierno regional. «Dio -dice- ayudas e incluso cursos» y en cuanto a su posible desconocimiento por parte de la población, afirma que «para la gente no es un producto que no se conozca, lo que pasa es que se considera un producto caro. Hay que tener en cuenta que lleva una labor manual tremenda y que su coste se va prácticamente en mano de obra».

También incide en que este tipo de empresas «están ayudando a que lo pueblos no se vayan despoblando, a dar trabajo a sus gentes. En la época de recogida contratamos a muchas personas de aquí, durante tres meses. Yo estoy casi aún empezando, pero pronto tendré que emplear a alguna persona para que me ayude con la finca».

El arándano, para Noriega, «es un producto excelente», también para la salud. «Cada vez se le encuentran más propiedades e incluso ya algunos médicos recetan su consumo a sus pacientes», asegura.

Los distintos tipos de mermeladas, los zumos y el almíbar se pueden adquirir en el Club Gourmet de El Corte Inglés, Cantabria Exquisita, Coliseum Fruit, Charcutería La Escogida, La Embuteca, La Tienduca (Mercado de La Esperanza), Covirán Juanjo y Delicatessen Plaza de las Cervezas, en Santander. El Maliaño y Santoña, en Amarlo Fruit; en Galizano, Súper Cano, y en Liérganes: Supermercado Puente Romano, Covirán Mora, Quesos Cobo, Casa Abascal y La Huertuca. En Torrelavega y Barreda: Uniko, Aliñarte y Carnicería Sito. En Reinosa, en Frutería El Nogal. Y Horesa en Argomilla y Panadería Oslé, en Gajano. Además en las confiterías María Luisa de Santander, Liérganes, Solares, Somo y Sarón.