Combinaciones de sabores y texturas en el Hotel Chiqui

En la actualidad, en Panorama solo hay carta y por el momento, a la espera que el ritmo de trabajo se estabilice, se mantiene la de antes del cierre, aunque el chef tiene preparados una decena de platos para incorporar. No obstante, la carta es generosa en propuestas y variada en géneros. En el capítulo de entrantes, pueden destacarse la ensalada de langostinos con un toque de miel y aceite arbequina. El chef trabaja con muchos ingredientes para conseguir un buen resultado. Además, hay unas croquetas de calamar con ali oli, unos rollitos vietnamitas, los mini rollitos crujientes con salsa de mango, las clásicas rabas, las gyozas de ibérico y jengibre, la tempura de bacalao y verduras, el tartar de atún y aguacate o el tomate de Cantabria, queso de las Garmillas, fruta, anchoa y boquerón.

Con los pescados, especialidad de la casa al igual que los arroces, Kike Pérez se esmera en ofrecer un punto de cocción ideal y juega con la originalidad de algunas guarniciones. Es el caso de los chipirones sobre risotto de hongos y ali oli de remolacha, el pulpo a la parrilla con papas arrugadas y mojo picón, la lubina a la sal con vinagreta de tomate y aceituna negra, el rape asado con quinoa roja, guisantes y salsa kimchi picante o el atún a la plancha con crema de cúrcuma y verduras al vapor con vinagreta de lenteja caviar.

En carnes también manda la variedad, desde una buena hamburguesa, hasta unos tacos de carnitas, un escalope vienés, una picaña de vaca vieja o unos canelones de calabacín al vapor rellenos de rabo de toro.

Finalmente, en postres hay especialidades interesantes como el brownie de chocolate con nueces, la tarta de queso, el volcán de chocolate, el candie de manzana, cookie y helado, la torrija brioche caramelizada con helado de vainilla y las frutas estofadas, zumo de naranja, Grand Marnier y helado de vainilla.