Somarroza, la sidra de Cantabria más laureada

Con estos datos, es de justicia destacar que las sidras de Somarroza se sitúan entre las más laureadas no solo de Cantabria sino del país, y hasta el punto que hay quien ha llegado a decir que son «el vega sicilia» en sidras. Las palabras llenan de orgullo a Jesús que es categórico: «No me importa que digan que vendemos la sidra más cara de España». Por algo será, pero en su trabajo diario solo caben la excelencia y la innovación. Poner en el mercado nuevos productos de alta calidad, como recientemente ha ocurrido con el bitter, es todo un reto. «Ya tenemos preparado para primera el undécimo producto de la gama, que va a ser revolucionario, pero no podemos adelantar nada porque la competencia nos vigila, están muy al tanto de lo que hacemos y de por dónde innovamos».

Pero si se hace balance del año, en Somarroza todos los datos son positivos. Con la pandemia los crecimientos han estado por encima del veinte por ciento y en 2021 se han cerrado las dos primeras operaciones de exportación, a Reino Unido y Japón.

Jesús, que durante tres décadas trabajó en el laboratorio de una empresa láctea, siempre había elaborado sidra en casa para consumo propio. «Pero me di cuenta que salía bien, que tenía facilidad para elaborarla con nuestras propias manzanas, y me decido en 2010 a comercializar la sidra natural, que fue la primera y que actualmente acapara el 50% de nuestras ventas. A partir de ahí, hemos sacado la sidra natural ecológica; las sidras espumosas, dulce -que están teniendo un crecimiento muy fuerte, ya que no se limitan a las navidades, sino que también están ganado presencia en las bodas- y seca; las sidrucas natural, dulce, de limón de Novales -esta surgió cuando estábamos experimentando con arándanos, pero nos convenció más que los frutos del bosque-, y canaria (con plátano), así como el bitter -de reciente lanzamiento pero que ha tenido una gran acogida-», detalla Jesús.

Mención especial merece, a juicio del propio Jesús, la joya de la corona, Capricho de Somarroza, una edición limitada de tres mil botellas elaborada únicamente con manzanas propias. Tras una crianza sobre lías que le proporciona un poco de aguja, el resultado es una sidra muy elegante, que tiene presencia en restaurantes de nivel, no en lineales.

Somarroza se abastece de manzana propia, ecológica, de tres fincas que tienen en Renedo con una superficie de unas dos hectáreas. Con ella elaboran la sidra natural ecológica, Capricho de Somarroza y el bitter. El resto lo tienen que comprar en Cantabria, preferentemente, y el otras regiones, porque aquí no hay suficiente para elaborar anualmente unos 125.000 litros en unas 200.000 botellas.

Una vez que la manzana entre en el lagar de Somarroza, un edificio construido en 2016, a raíz de la incorporación de Cecilia y Lucía a la empresa, se procede a la limpieza, selección y triturado en la prensa. El mosto se traslada a depósitos de acero inoxidable donde fermenta a temperatura controlada en unos tres meses. Luego queda ahí el tiempo necesario hasta que se embotella, ya que la sidra no se almacena el botella, no está preparada para envejecer. De hecho, Jesús estima que el mejor momento para tomar la sidra es en el periodo que transcurre entre seis meses y un año desde que se ha embotellado. Por ello Somarroza no tiene stock:«Embotellamos a medida que llegan los pedidos».

Para Jesús cada sidra tiene su encanto. La natural «se hace con honradez. Es una sidra con todas las de la ley. La base de todas las demás. En nuestro caso nunca hemos mezclado la sidra de un año con otro».

En el caso de la espumosa dulce, Jesús no duda en calificarla de «única. Llama la atención en los concurso. Es distinta a todo lo que hay en el mercado. Hace un espumoso es un grado superior, requiere técnica y conocimientos, y en eso Cecilia es clave. Su incorporación y la de Lucía han sido claves para que Somarroza haya llegado hasta donde lo ha hecho», comenta un padre orgulloso. Otro elemento diferencia del lagar de Renedo para esta variedad es que disponen de una embotelladora isobárica, que permite obtener mejores resultados.

Esta sidra espumosa dulce logró en San Sebastián una medalla de oro y en 2016 ganó a los asturianos en su propia casa en el concurso de sidras de gala.

Sobre el bitter, el fundador de Somarroza recuerda como empezaron a trabajar con 30 botánicos, «pero lo dejamos en 13 infusiones, maceración pura y dura, lentamente. Partimos de la sidra natural ecológica y luego se maceran flores, especias, raíces y frutas para conseguir un sabor único sin colorantes ni aromas artificiales».

-Sidra natural.

-Sidra natural ecológica.

-Sidra espumosa dulce.

-Sidra espumosa seca.

-Capricho de Somarroza.

-Sidruca natural.

-Sidruca dulce.

-Sidruca con limón de Novales.

Sidruca canaria (con plátano).

-Bitter.