El 100% de los institutos cántabros ya ha tomado medidas para regular el uso de los móviles en el aula

José Luis Blanco, director general de Calidad y Equidad Educativas, representará a la Consejería en el encuentro con el Ministerio. La naturaleza informal de la reunión anticipa que no se saldará con un documento cerrado, pero con toda probabilidad será un buen escenario para poner en común las propuestas y experiencias existentes, entre ellas, las de las comunidades que ya han regulado el tema, como Galicia y Castilla-La Mancha. Blanco, por su parte, podrá dar cuenta de los últimos pasos que ha dado Cantabria en este sentido: desde incluir por primera vez una llamada a su regulación en las instrucciones de inicio de curso, hasta la elaboración de un estudio para conocer, con más detalle, qué medidas aplican los centros educativos en relación al uso del móvil.

Con la participación de 281 centros de la región (de un total de 300), el estudio concluye que el 100% de los institutos públicos y los centros concertados que imparten Secundaria ya ha tomado alguna medida para la prohibición total o parcial del uso del móvil en la jornada lectiva, y que muchos -al menos, todos los públicos- han dejado constancia de ello en sus normas de organización y funcionamiento. Es más, el curso pasado, el 90% de los institutos públicos consultados ya regulaba este asunto, por lo que ese 10% extra puede responder a la mención expresa que hizo la Consejería en las instrucciones de inicio de curso y que funcionó como un acicate.

«A muchos centros les ha servido para avanzar. En agosto debatimos mucho si lo incluíamos o no, y pensamos era la única manera de darle importancia en ese momento. Y estamos muy satisfechos con la acogida», respalda Sergio Silva, consejero de Educación. El debate cántabro ha coincidido con la despegue de la discusión en todo el país. «Y yo me alegro mucho de que haya un debate nacional porque el tema de internet y de los móviles tiene muchas derivadas -convivencia, acceso al porno, violencia- y es de lo más importante que está pasando en los centros educativos», apoya Silva.

Estos van dando pasos de más o menos calado. La prohibición parcial -por lo general, esto significa que solo se prohibe el uso del móvil en el aula, pero no en los recreos o los pasillos- es la elegida por algo más del 60% de los institutos públicos y también por algo más de la mitad de los centros concertados que imparten Infantil, Primaria y Secundaria. Por debajo del 40% está la prohibición total, que, por contra, sí que es la opción mayoritaria en los colegios públicos y en los centros concertados de Infantil y Primaria. Por otro lado, lo más frecuente es que las medidas de limitación afecten más al alumnado que a profesores o resto de plantilla, y también que se apliquen durante todo el horario lectivo.

«La Consejería ha puesto el debate en funcionamiento», admite Norberto García, portavoz de los directores de Secundaria y responsable del IES Montesclaros de Reinosa, el primer instituto que se declaró libre de móviles. «Y ese es el objetivo al que deben tender el Ministerio y las comunidades lo antes posible: espacios libres en todo el recinto, en todo momento y para todos», indica García, que cree que, más allá de los centros, las familias serán «las más interesadas».