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CONSUELO DE LA PEÑA
Viernes, 9 de junio 2017, 08:22
Durante casi un año, desde mediados de 2016 hasta el pasado mes de marzo, un empleado de Sodercán burló los sistemas de seguridad informáticos de la sociedad pública y puso en peligro todos los sistema de información. El pirata informático o hacker que es ... delegado del sindicato Comisiones Obreras (CCOO), operaba desde el ordenador portátil que la empresa puso a su disposición como trabajador de la misma, y en horario laboral.
Descubierto el ardid a primeros de marzo, la sociedad pública abrió un expediente disciplinario al trabajador, que concluyó con una propuesta de sanción del instructor que ha sido asumida íntegramente por Sodercán. Así, la empresa pública ha acordado suspender de empleo y sueldo por un período de tres meses a A. H. M. por la comisión de una falta muy grave (fraude, deslealtad, abuso de confianza o transgresión de la buena fe contractual), contemplada tanto en el convenio colectivo como en el Estatuto de los Trabajadores. Este tipo de infracciones puede ser, incluso, causa de despido. Además, la empresa inhabilita al trabajador para participar en procesos de ascenso o promoción interna durante año y medio.
El instructor del expediente concluyó que el sindicalista no sólo utilizó el ordenador de la compañía para usos ajenos al puesto de trabajo, sino que "actuó como un verdadero hacker interno dentro de Sodercán, obteniendo irregularmente permisos de administrador del ordenado, descargando y/o instalando programas no permitidos".
Así, accedió a páginas webs no relacionadas con el trabajo y desarrolló una intensa actividad. Lo mismo visionaba páginas sobre vehículos, que páginas sobre cómo piratear teléfonos móviles y burlar la seguridad de sistemas de información; lo mismo veía películas en línea a través de descargas ilegales que se registraba en páginas de apuestas en línea o accedía a información sobre reparación de tejados y bricolaje.
Para ello obtuvo de manera irregular los privilegios de administrador y utilizó la red Wifi de una empresa vecina, situada en el Parque Tecnológico, "saltándose y comprometiendo la seguridad de la red informática y los sistemas de información" de Sodercán. Para no dejar rastro, utilizó "diversas estrategias dirigidas a ocultar la actividad que desarrollaba".
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