El aceite, con un 25%, lidera el incremento de precios de la cesta de la compra en Cantabria

Los porcentajes están sacados de los datos del IPC (Índice de Precios al Consumo) desgranados por el INE (Instituto Nacional de Estadística) en su comparación por comunidades autónomas, con valores acumulados hasta el pasado mes de junio. De junio de 2021 a junio de 2022. Las fechas son importantes. La guerra en Ucrania -desde febrero- fue el detonante de que el IPC se disparase (un 6,5% hacia arriba de febrero a junio de este año en el Índice General Nacional), pero el valor ya venía creciendo en los meses anteriores (de junio de 2021 a enero de 2022, el dato nacional ya se había elevado un 3,5%). Con la guerra se desbocó lo que ya estaba al alza.

Desmenuzando esas tablas, sale la conclusión del aceite y los huevos como lo que más se ha encarecido en Cantabria (25 y 23,4%, respectivamente). Pero es que prácticamente todo lo esencial sigue esa tendencia. Lo siguiente es la leche (19,1%), las frutas frescas (18,1%) y el pan (15,7%). En la región esos cinco pilares de la compra de cualquier hogar encabezan la lista.

Tomemos, precisamente, esos cinco productos esenciales -lo son directamente o por estar en la base de la producción de otros muchos productos- para ver cómo se han comportado los precios aquí en relación al resto del país. De los cinco, sólo en uno la subida fue superior en la comunidad autónoma que en la media nacional. El pan, que a nivel nacional se elevó un 13,9% (y aquí, como se ha dicho, un 15,7%, la séptima subida más pronunciada del país). En el resto, los precios en las tiendas y en los supermercados de Cantabria resistieron algo mejor -dentro de lo obviamente complicada que se está volviendo la situación para todos los hogares-. Llama la atención lo del aceite. El 37% de media en España es dramático. La diferencia con el dato local es de un 12%. De hecho, Cantabria fue la comunidad donde en este caso menos aumentó la factura.

Todos esos ejemplos sirven para explicar ese 11,5% de la comunidad autónoma frente al 15,5% de Murcia, el 14,7% de Extremadura o el 14,6% de Aragón (las tres autonomías que encabezan esta tabla).

Y hay más. La subida de los cereales (un 13,7%) es la tercera menos destacada. La de la carne de vacuno (11,6%), la cuarta (mismo puesto que con la leche). Y la de ovino, la segunda. Saliéndose de esos datos de supermercado, de carrito, también conviene significar otras subidas brutales. El epígrafe 'Calefacción, alumbrado y distribución de agua' se desbocó con facturas un 33,4% más elevadas (la media fue del 35%).

Pero también hay bienes y productos que aquí han crecido por encima de la media (en las tablas que acompañan este texto hay numerosos ejemplos de subidas mayores o menores aquí que en el resto del país). Lo que más llama la atención en este aspecto tiene que ver con el azúcar. Si usted es goloso y vive en Cantabria, el capricho le va a salir bastante caro. Al menos, más caro que a la mayoría de españoles. La subida en la región es casi el doble de pronunciada que la media (13,1 frente a 7,6%). La tercera más grande por comunidades. Y ojo con el agua, los refrescos o los zumos. Igualmente ocupa ese tercer puesto de encarecimiento.

Ya que estamos, si para usted el refresco es normalmente el acompañante de algo más fuerte -con tres cubitos de hielo-, debe saber que el precio de las bebidas alcohólicas se eleva también aquí por encima de la media y que el puesto de la región en este caso es el quinto. Y si le añade una rodajita de limón, más madera. Recuerde: la fruta fresca se encareció un 18,1%.