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La investigación que ha abierto la Universidad de Cantabria (UC) por la publicación de mensajes homófobos en la cuenta del Consejo de Estudiantes en la red social X (antiguo Twitter) se centra en estos momentos en identificar al autor o autores de esos polémicos ... tuits.
Esta es la primera incógnita que tienen que despejar para, posteriormente, determinar las correspondientes responsabilidades y si procede -ese sería un segundo paso- la apertura de un expediente sancionador. «En este momento ni siquiera sabemos fehacientemente quiénes son los autores de dichos mensajes», reconoció ayer el rector de la UC, Ángel Pazos, en una comparecencia ante los medios que tuvo lugar por la mañana.
En una entrevista posterior a El Diario Montañés, la máxima autoridad de la Universidad de Cantabria no pudo precisar cuándo finalizará la investigación interna que han abierto para esclarecer esta polémica, pero sí fijó como horizonte «este curso». Al mismo tiempo, aseguró que si ese «expediente de información reservada» revela una responsabilidad de tipo penal, en este caso podría ser un delito de odio, entonces acudirán a la Fiscalía.
Pazos consideró, una vez más, «absolutamente inaceptable y condenable» el contenido de los tuits que se han emitido «utilizando» la dirección de X del Consejo de Estudiantes. Un hecho «sin precedentes», según reconoció a este periódico, por su «peculiaridad». Y es que el problema radica, a su entender, en la utilización de una cuenta de la Universidad para un uso inadecuado.
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Dicho esto, el rector de la UC aseguró que, por el momento, no puede aportar nada nuevo sobre estos hechos porque en las últimas 48 horas la UC ha emitido cuatro comunicados al respecto, apuntando que «en cuanto» la Universidad conoció los mensajes, exigió al Consejo de Estudiantes su retirada, disculpas e identificar a los responsables.
Las dos primeras peticiones se cumplieron pero la tercera no, por lo que el miércoles se decidió abrir un expediente de información reservada, que es un proceso de investigación para saber «quiénes son las personas que están detrás de esos tuits», y una vez conocidas, analizarlos «en detalle», así como si hay algún otro mensaje «que utilizando las cuentas del Consejo pueda tener un carácter sancionable».
Una vez que finalice la investigación, Pazos deja claro que la Universidad adoptará «todas las medidas que procedan, disciplinarias o de otro tipo» y las dará a conocer públicamente.
En este sentido, recordó que el proceso de investigación se «acaba de abrir» y «llevará su tiempo» porque este tipo de actuaciones «deben ser garantistas». «No puedo adelantar ahora mismo cuanto tiempo nos va a llevar», insistió, al tiempo que destacó «la rapidez» con la que ha actuado la UC al conocer los mensajes y abrir el expediente, «que es la celeridad que un hecho de este tipo merecía». «Nosotros hemos dado los pasos que teníamos que dar: apertura de expediente, y cuando se sustancie y sepamos lo que ahora no sabemos, habrá las responsabilidades, medidas o sanciones, lo que nos diga, pero acabamos de empezar».
Respecto a las elecciones al Consejo de Estudiantes, confirmó que se celebrarán el 25 de enero, salvo que la Junta Electoral decida otra cosa, algo que a su juicio es «improbable».
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