Los transportistas colapsan la A-67 y los accesos a Santander en protesta por el precio de los carburantes

Desde primeras horas de la mañana cabezas tractoras llegadas de toda Cantabria se han ido concentrando en la Ciudad del Transportista y por todo Raos listas para emprender sus marchas de protesta por el inasumible precio de los combustibles. Había una convocatoria oficial de la Asociación de Empresarios de Transportes Discrecionales de Mercancías por Carretera de Santander y Cantabria (Asemtrasán) para emprender una 'marcha lenta' por la autovía A-67 hasta Torrelavega. Pero a la par, otra convocatoria impulsada por la Plataforma en Defensa del Transporte -la que convoca el paro iniciado el pasado lunes 14 a nivel nacional- no autorizada pretendía colapsar el centro de Santander. Todos juntos, los que secundaban una o la otra, empezaron el día en Raos, haciendo sonar sus bocinas al unísono, que se escuchaban a kilómetros de distancia sin distinción.

Ya antes de las once de la mañana, salieron de Torrelavega decenas de camiones con destino a Santander para empezar desde la capital cántabra esa 'marcha lenta' por la A-67 en sentido inverso (Santander-Torrelavega). A esta medida estaban convocados los 470 transportistas asociados a Asemtrasán y se han ido sumado muchos otros llegados de toda Cantabria y de diversos colectivos, en una marcha comunicada a la Delegación del Gobierno en Cantabria el pasado miércoles y que ha obtenido la correspondiente autorización.

La caravana de camiones pretendía tomar la autovía, dar la vuelta a la rotonda de la Habana Vieja de Torrelavega y después emprender el camino de regreso. Se desconoce, de momento, cuánto tiempo podría atascarse la autovía. En cualquier caso, desde Asemtrasán destacaron que «vamos a respetar las normas de circulación», por lo que circularon a un mínimo de 60 km/h, respetando las distancias de seguridad y por el carril derecho.

Desde primeras horas la explanada de Raos en la que se encuentra la Ciudad del Transportista ha estado repleta de cabezas tractoras estacionadas, listas para participar en esta protesta, con la incógnita de saber quiénes iban a tomar la A-67 y quiénes se saldrían del itinerario hacia el centro de la ciudad.

Las bocinas de los camioneros se escuchaban tanto desde Valle Real como desde El Corte Inglés y los establecimientos comerciales de la zona de Nueva Montaña. Antes del mediodía ya había una larga cola en la que se vieron atrapados los turismos que se dirigían a la ciudad. Por otro lado, tomando como referencia la gasolinera de Nueva Montaña, los precios del diésel y la gasolina están algo más bajos que estos días atrás, cuando rozaron (sin llegar) los dos euros por litro.

Los conductores han marchado entre continuos pitos y portando pancartas con inscripciones como 'Necesitamos una Administración que aporte solución. SOS', 'Ya no aguantamos más' o 'Ni de izquierdas ni de derechas. Somos los de abajo, que vamos a por los de arriba'; algunas de ellas colgadas de los vehículos y otras en manos de los propios conductores, que se han bajado de sus camiones para exhibirlas desde el arcén. Es así como han obtenido la simpatía también de los conductores de los coches, que han hecho varios gestos de apoyo a los camioneros.

Durante casi una hora han estado saliendo camiones desde el Polígono de Raos en una protesta que ha contado con representación de casi todos los autónomos y pymes de Cantabria, que han circulado hasta la capital del Besaya ocupando el carril derecho de todo el trayecto, dejando paso a los turismos por el izquierdo.

Dada la elevada participación, aún seguían saliendo los últimos camiones de Raos cuando los primeros ya habían llegado a la rotonda de la Habana Vieja de Torrelavega, donde la caravana ha dado la vuelta para regresar a Santander. Así, la marcha ha ocupado ambos sentidos de la autovía, al cruzarse unos de ida y otros de vuelta.

Este lunes la huelga de transportistas entra en su segunda semana, y afronta unos días claves a la espera del resultado de las negociaciones en Madrid, con reuniones entre el sector, la vicepresidenta económica Nadia Calviño y las ministras de Hacienda y Transportes, María Jesús Montero y Raquel Sánchez.

La Plataforma para la Defensa del sector del Transporte tenía intención de convocar una marcha por el centro de Santander, tal y como se está haciendo en otras ciudades del país, pero en este caso la protesta no ha estado autorizada por la Delegación del Gobierno en Cantabria por presentarse fuera de plazo y también por no haber justificado la urgencia para su realización.

Al parecer, la solicitud del permiso se tramitó desde la Delegación del Gobierno en Madrid para que se le diese traslado a la cántabra, pero se hizo el sábado, por lo que no dio tiempo a recabar los informes necesarios de las fuerzas policiales, un trámite imprescindible para poder otorgar los permisos.

Cuando dieron las 12.00 los camiones salieron en caravana de Raos. La mayoría hizo el giro para tomar la A-67, pero varias decenas se salieron del recorrido y cogieron la S-10 hacia el centro de Santander, haciendo mucho ruido, con la idea de meterse en el centro y formar un colapso. Pero en la rotonda de la Marga, varias dotaciones de la Policía Nacional y de la Policía Local les cortaron el paso. No tenían permiso para entrar en la ciudad, y los agentes impidieron que pasaran tanto por Marqués de la Hermida como por Valdecilla.

La mayoría de estos camiones retenidos en La Marga se dio la vuelta, pero, en vez de seguir la marcha autorizada y tomar la A-67 en dirección a Torrelavega, muchos han decidido buscar otras calles para entrar en Santander.

Algunos lo hicieron por Nueva Montaña, tocando sus bocinas por el barrio, aplaudidos por vecinos a su paso. Se dirigían hacia el Pctcan mientras otra parte llegó hasta el centro comercial de Peñacastillo y se puso a dar vueltas por las vías de esta zona, con la idea de llegar después hasta Primero de Mayo.

Un helicóptero ha sobrevolado estos barrios de Santander, tal vez para controlar las rutas que iban tomando los camiones y poder evitar que entraran en el centro. Parece que la protesta se ha ido desarrollando de forma impsovisada. Los transportistas van tomando diversas direcciones, de manera que transitan por el municipio de Santander, aunque sea por barrios periféricos, tal y como se está haciendo hoy en marchas convocadas en otras ciudades del país.

Pasada la una de la tarde ya no quedaban filas de camiones transitando lentos por estos barrios de Santander. Estos camiones tomaron la A-67, al igual que los de Asemtrasán, para hacer la marcha de Torrelavega, aunque algunos siguieron la ruta por vías adyacentes, entrando y saliendo de las rotondas de la autovía, con la idea de entorpecer algo más el tráfico.

Sobre las dos de la tarde, la marcha de la A-67 ya estaba de vuelta, otra vez en caravana en el término de Santander rumbo a su base en la Ciudad del Transportista.