Cantabria recupera habitantes; Santander y Torrelavega los pierden

De acuerdo con las cifras oficiales de población resultantes de la revisión del padrón municipal a 1 de enero del año 2021 -números que el Instituto Nacional de Estadística (INE) volcó recientemente en su página web-, Cantabria tenía en esa fecha un total de 584.507 habitantes. Son 1.602 más de los que había el 1 de enero del año 2020 y 3.429 más de los que había el 1 de enero del año 2019, cuando la comunidad autónoma empezó a recuperarse de un preocupante bache poblacional que le llevó a perder hasta 12.892 residentes entre 2011 (593.121) y 2018 (580.229).

En ascenso por tercer año consecutivo, el censo de la región presenta hoy en día su mejor aspecto de los últimos seis años gracias sobre todo a localidades como Castro Urdiales (+705), Piélagos (+304) y Camargo (+177), donde, según las cuentas del INE, se han detectado los mayores ascensos poblacionales entre los municipios de mayor densidad poblacional.

584.507habitantes tenía la comunidad autónoma de Cantabria a día 1 de enero de 2021.

Especialmente llamativo es el caso de Piélagos, ayuntamiento que lleva once años consecutivos viendo su censo incrementarse. Sorteando todos y cada uno de los obstáculos que ha ido encontrando durante su devenir demográfico por esta última década, la localidad ha logrado aumentar su padrón en 4.000 habitantes -en 3.812, concretando algo más- para afianzarse definitivamen-te como el quinto municipio de la comunidad autónoma de Cantabria con el mayor número de residentes.

172.221residentes tenía Santander a día 1 de enero de 2021. Pierde 1.154 habitantes.

El cuarto es Camargo, sobrepasado ya hace mucho tiempo por Castro Urdiales, que se mantiene firme en el tercer puesto, y los dos primeros continúan siendo Santander y Torrelavega, que no salen bien parados del último recuento. Los dos han perdido habitantes en relación con el año anterior.

Según el INE, Santander retrocede de 173.375 a 172.221, es decir, que se deja 1.154 residentes respecto al 1 de enero de 2020. La capital, que llevaba tres años creciendo demográficamente (lo hizo en 2017, 2018 y 2019), concluyó el último contabilizado invirtiendo esa tendencia al alza sin que las razones para eso estén muy claras.

«Santander tiene un saldo vegetativo negativo, lo cual ya supone un handicap de partida», recuerda el concejal de Fomento, Vivienda y Movilidad Sostenible, César Díaz, que, en ese sentido, se remite a sus propias cifras. «Cada día mueren cinco personas y nacen tres», de manera que «cada año perdemos alrededor de los 700 habitantes», calcula. «Y luego, habrá que ver cuál ha sido la incidencia de la pandemia en la ciudad», añade el edil, que así, a bote pronto, no encuentra otras razones de peso que justifiquen la pérdida de más de un millar de residentes.

51.237residentes tenía Torrelavega a día 1 de enero de 2021. Pierde 360 habitantes.

Ávido por recabar información, Díaz se reconoce algo extrañado por un cambio de tendencia que él considera que se estaba consolidando gracias a dos factores: «la reducción casi a cero del saldo migratorio negativo con los municipios de nuestro entorno» y «el abaratamiento del precio de la vivienda».

Que es el mismo argumento -las mayores oportunidades que hay de acceder a una vivienda- que esgrime el concejal de Economía y Hacienda, Pedro Pérez, para motivar el crecimiento demográfico que venía observándose en Torrelavega hasta que el INE le quitó 360 habitantes. «Llevábamos una buena tendencia», se lamenta el edil, que confía en que las medidas adoptadas para intentar fijar la población «continúen proporcionando frutos y hagan que este retroceso, que en todo caso no es sangrante, sea consecuencia de la coyuntura actual».