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Ramón Ruiz fue el encargado de acordar con los sindicatos de Educación la última revisión del complemento específico, congelado desde entonces y uno de los ... motivos por los que los docentes salieron ayer a la calle. Lo hizo durante su etapa como director general de Política Educativa (2003-2011) a las órdenes de la entonces consejera Eva Díaz Tezanos. El socialista, que en el segundo bipartito PRC-PSOE asumió nuevas responsabilidades y se puso al frente de la cartera, estuvo ayer en la manifestación que recorrió las calles de Santander. Ruiz acompañó al nuevo secretario general del PSOE de Cantabria, Pedro Casares, que acaba de recuperarle para hacerse cargo de la nueva Escuela de Formación Permanente del partido. Una institución que echará andar en las próximas semanas y que Casares prometió a la militancia durante la campaña de las primarias que le enfrentó a Pablo Zuloaga y que llevará el nombre de Alfredo Pérez Rubalcaba.
La decisión, aprobada por la Ejecutiva Autonómica del PSOE, ha justificado este nombramiento «por su experiencia como gestor público y como docente», pero también por su vinculación personal con Rubalcaba. «La educación pública nunca estuvo en mejores manos que cuando fueron ellos (Ruiz y Tezanos) quienes la gestionaban», explica Casares, que entiende que el elegido encarna los valores pedagógicos y el espíritu de reflexión que debe tener la escuela que llevará el nombre «del mejor político de Cantabria en democracia».
Como ya explicaron los socialistas durante el Congreso Regional que celebraron a mitad de marzo en el Paraninfo de la UC, donde entre las actividades paralelas realizaron un homenaje al exministro del Interior y exsecretario general del PSOE, esta escuela de formación permanente aspira a ser «un faro de conocimiento, de innovación, de reflexión y de análisis» para los cargos públicos del partido y también para la ciudadanía progresista de Cantabria.
Este organismo funcionará en paralelo a la Fundación Matilde de la Torre, que nació con objetivos similares: renovar el ideario progresista, reforzar su relación con la sociedad de Cantabria y formar a los responsables políticos del futuro. Al frente de ella permanece otro exconsejero de Educación socialista, Francisco Fernández Mañanes, que en este caso apoyó la opción de Zuloaga en el último proceso interno. Ramón Ruiz, maestro, pedagogo e inspector educativo con experiencia en la dirección de diversos centros fue, precisamente, uno de los perjudicados por la llegada de Zuloaga a la dirección del PSOE regional en 2017. Una de sus primeras medidas como nuevo líder fue promover su relevo por Mañanes.
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