Los ciudadanos pueden rendir hoy homenaje a Rafael de la Sierra

La capilla ardiente estará abierta a todo los ciudadanos que quieran rendir homenaje al político regionalista y dejar su pésame en los libros de firmas que el Parlamento ha habilitado para ello. «Estará allí para que todos los cántabros y todos los regionalistas que no nos hemos despedido de él podamos pasar por ahí y darle el último adiós«, decía ayer la consejera de Presidencia, Paula Fernández, que ha trabajado codo a codo con De la Sierra desde hace veinte años.

Este homenaje llega tras una jornada en la que se sumaron las condolencias y las evocaciones a la persona y el político que fue Rafael de la Sierra.

El fallecimiento del vicesecretario del PRC y exconsejero del Gobierno marcó así una jornada política en el día en que se constituía el nuevo Parlamento. De hecho fue aquí, dentro del hemiciclo en el que tantas horas pasó y debatió donde se desarrolló uno de los momentos más sentidos. Un escaño vacío, De la Sierra debería haber tomado posesión ayer junto a sus compañeros del PRC, y un minuto de silencio seguido de una cerrada ovación. Las primeras palabras del nuevo presidente del Parlamento, Joaquín González, ese cargo que él ocupó de 1999 a 2003, fueron también para De la Sierra y para el sentimiento encontrado de una jornada de celebración democrática justo el día después de su muerte. Ya por la mañana, la reunión del Consejo de Gobierno también había tenido un silencio recogido en recuerdo de su exconsejero y se había dejado su silla vacía como símbolo de su presencia y papel en las tareas del Ejecutivo.

Además de impulsar el PRC junto a su líder, Miguel Ángel Revilla, De la Sierra ha ocupado gran número de responsabilidades en su trayectoria política. Ha sido concejal y teniente de alcalde de Santander, consejero, de Cultura, Educación, Juventud y Deporte en el gobierno de Jaime Blanco del año 1990, y casi treinta años después, de Presidencia y Justicia, en el último bipartito PRC-PSOE.

También fue diputado regional, portavoz parlamentario y presidente de la Cámara regional, este último cargo de 1999 a 2003, y promovió la reforma del Estatuto de Autonomía con el denominado «Pacto de Carmona» en 1997.

Desde el inicio de la jornada la muerte de este histórico del PRC se ha dejado notar en la clase política y en las instituciones. En las redes sociales o en declaraciones oficiales todos destacaron su talante, su apuesta por el diálogo y su talla política.

Tanto la consejera de Presidencia y Justicia, Paula Fernández, como el portavoz parlamentario, Pedro Hernando, han lamentado la pérdida de quien fue su mentor político.

Fernández, que en abril reemplazó a De la Sierra en la Consejería de Presidencia y Justicia y es secretaria de Organización del PRC, ha dicho que la pérdida «es terrible» para Cantabria y ha enfatizado la honradez y la capacidad de negociación y de entendimiento de su «padre político».

El portavoz regionalista en el Parlamento, Pedro Hernando, ha definido por su parte a De la Sierra como una persona «trabajadora, seria, rigurosa, honrada, leal» y «con una gran formación».

«Vamos a seguir trabajando para que la imagen de Rafael de la Sierra, su doctrina, su manera de hacer política y su manera de querer a Cantabria perduren en el tiempo», ha apostillado.

Pero, al margen del PRC, otros partidos e instituciones de Cantabria han querido transmitir el reconocimiento y el cariño a De la Sierra. Tanto la presidenta saliente de la Cámara, la socialista Dolores Gorostiaga, como su sucesor en el cargo elegido hoy mismo, Joaquín Gómez, también del PSOE, han ensalzado a De la Sierra. El líderl del PSC-PSOE, Pablo Zuloaga, destacó que De la Sierra fue «un hombre honesto, cuya trayectoria intachable le deja como ejemplo del espíritu de acuerdo, de consenso y de la política al servicio de Cantabria».

María José Sáenz de Buruaga, presidenta del PP de Cantabria, señaló que «la política pierde un referente que, como los grandes, hacía fácil lo más difícil», y el líder del Ciudadanos, Félix Álvarez, resaltó de él que se pierde «un político enorme, pero sobre todo, a partir de ahora nos faltará una gran persona» que »trabajó por Cantabria y por España sin complejos«.

No solo partidos políticos, instituciones, empresas, organizaciones y personas anónimas sucecieron sus muestra de respeto por el político regionalista.

Tras el fallecimiento de Rafael de la Sierra, su escaño tendrá que ser ocupado. Para ello, en la primera sesión plenaria se tomará conocimiento del fallecimiento del regionalista y se dará traslado a la Junta Electoral de Cantabria para que el escaño vacante pueda ser ocupado por el siguiente de la candidatura, que es Pablo Diestro, alcalde de Reocín.