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El Gobierno de Cantabria cree que ha habido «errores humanos» en el recuento de votos de las elecciones autonómicas del pasado domingo, como al parecer ha sucedido también en las municipales, y defiende que el escrutinio se está repitiendo «con total transparencia y ... garantía».
Así lo ha manifestado la consejera de Presidencia y Justicia en funciones, Paula Fernández, este jueves a preguntas de los periodistas al inicio del acto para celebrar el Día de la Seguridad Privada, al que también ha acudido el delegado del Gobierno, Eduardo Echevarría, que ha hablado igualmente de «errores humanos» al contabilizar las papeletas (al 'cantar' resultados o transcripción de actas, por ejemplo).
A juicio de Fernández «siempre» se trata de ese tipo de fallos. Y, en todo caso, la también secretaria de Organización del PRC ha apuntado que es la primera vez que se hace un recuento así tras unas elecciones, examinando los votos en todas las mesas.
«No recuerdo que se haya hecho en otra ocasión», ha manifestado, para evidenciar a continuación que «ahora se ven fallos que no sabemos si se producirán siempre».
«Se entiende que sí, y que son más achacables a un presidente de mesa, que es un papel que hace por primera vez en ese momento, o a los representantes de la administración, a la hora de que volcar datos», ha considerado.
De todas formas, la responsable de Presidencia y Justicia ha remarcado que en Cantabria ha habido 823 mesas electorales el 26M, de modo que «si se detectan errores en cinco o siete mesas no creo que sea algo tan terrible», ha opinado.
La consejera ha aprovechado su comparecencia a petición de los medios para dejar «claro» el papel del Ejecutivo en este proceso, señalando que el recuento de papeletas lo hace la Junta Electoral. «Es un tema que no llevamos nosotros desde el Gobierno de Cantabria».
Así, la empresa que ha asistido a la administración autonómica durante todo el proceso electoral -contratada al efecto por el Gobierno- ha asistido también al recuento de votos, pero «no ha tenido el protagonismo ni ha sido ella la que ha llevado el asunto», ha aclarado.
El delegado del Gobierno en Cantabria, Eduardo Echevarría, no teme acusaciones de «pucherazo» por parte de posiciones de ultraderecha, y después de que la subsanación de errores haya dejado, por ejemplo, a Vox fuera del Ayuntamiento de Torrelavega.
Y no lo teme porque quien regula todo el proceso son las juntas electorales, conformadas por «muchos profesionales» y «gente de mucho prestigio».
Echevarría cree que se han producido «errores humanos» en el recuento de votos tras las elecciones del pasado domingo, lo que ha obligado a repetir el escrutinio, a nivel municipal y autonómico.
De todas formas, el dirigente socialista ha defendido que el procedimiento, llevado a cabo por la Junta Electoral, cuenta con «todo tipo de garantías» y «transparencia», y no teme por tanto que con motivo del mismo haya acusaciones de «pucherazo» desde posiciones de ultraderecha.
En este sentido, ha apuntado que puede haber transcripciones de resultados que no han hecho «de manera correcta», aunque ha valorado como «lo más positivo» del procedimiento el que haya «todo tipo de garantías», las que ofrece la propia Junta Electoral, o el hecho de que las actas estén repetidas en las distintas instituciones implicadas, lo que permite retomar «con mucha tranquilidad y serenidad el resultado real».
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