«Me daba miedo estar con una dosis»

Inmersos en Cantabria en la quinta ola, con récord de contagios incluido, y con más temor que nunca a las nuevas variantes del virus, las personas del grupo de edad de 60 a 69 años que aún no han recibido las dos dosis (a fecha del jueves eran unas 35.000) se muestran especialmente «preocupadas». «Estaba deseando que llegase este momento», señala Rosana Orduña, de 62 años, que fue una de las muchas personas que acudieron ayer al Palacio de Exposiciones de Santander después de que Sanidad haya decidido dar un arreón a los segundos pinchazos de AstraZeneca que aún están pendientes (hasta el domingo van a «volcarse» en esta franja, con citas en los hospitales de Sierrallana y Tres Mares además de en la capital). Hay que tener en cuenta que, según las recomendaciones de la Agencia Europea del Medicamento, la segunda inoculación de esta fórmula se debe administrar doce semanas después de la primera. María Consuelo Casas García, una mujer de 63 años que recibió el primer pinchazo el pasado 15 de abril, reconocía que tanto tiempo es demasiado. «Han tardado mucho», sentenciaba. Ahora tras la segunda dosis recibida ayer, dijo sentirse mucho «más tranquila» ya que no oculta el miedo que siente por el descontrol de contagios al inicio del verano: «La gente tiene que ser responsable», aconseja.

La alta incidencia entre los jóvenes ha incrementado el temor de este grupo de edad. «Me daba miedo estar solo con una dosis porque, aunque te cuides, nadie está exento del virus», confiesa María Teresa Pérez, de 63 años, que prefiere vacunar cuanto antes a los jóvenes ya que «parece no importarles llevar el virus a casa». Argumento que comparte Orduña, cuyo mayor temor era contagiar a su madre, con la que convive. De hecho, asegura que sale de casa «lo justo y necesario. ¿Si yo me contagio, quién cuida de mi madre?», apunta tras reiterar su crítica por la tardanza a la hora de completar la pauta completa, aunque ya se sabía de antemano que AstraZeneca cuenta con esos plazos. «Se me ha hecho muy largo viendo que había personas con la pauta completa de otras vacunas», explica.

Tardanza y desconcierto. Y es que muchos de los citados ayer en el vacunódromo del Palacio de Exposiciones recibieron en su día un mensaje que anulaba su fecha de vacunación. Y lo que no se especificaba era que se iba a adelantar la inoculación de la segunda dosis en algunos casos hasta en dos semanas. Azucena Agüeros fue una de las afectadas. Asegura que fue desconcertante porque «era un mensaje muy escueto». No oculta que en un primer momento se asustó porque «con los datos que hay en Cantabria no quería seguir esperando». También le pasó a Aurelio Laredo, que confiesa que se puso muy nervioso. «Con nuestra edad lo normal no es pasar el virus asintomáticos y me daba mucho respeto alargarlo». Él acudió a la cita con su mujer, Beni Madrazo, que también recibió la segunda dosis: «Parecía que no iba a llegar nunca el momento». Señala que el mensaje incierto que recibieron ambos y el disparo de los contagios en Cantabria les alarmó aún más. «Quería que llegase este día para poder estar tranquila», incide.

En un contexto en el que la región ha batido el récord diario de contagios de toda la pandemia, con 358 en una sola jornada, algunos de los presentes creían que la solución es vacunar a los jóvenes cuánto antes. Sin embargo, María Teresa Pérez lamenta que las consecuencias de los contagios entre la juventud las acaban pagando también las personas mayores. «Yo trato de evitar todo, pero hay cosas que están fuera de mi control», reflexiona. Considera que la situación es alarmante con o sin la segunda dosis. Su hermana se contagió con la pauta completa ya puesta y lo pasó mal. Agüeros apunta al respecto que «al final, las personas mayores vivimos en el miedo».

La tardanza en inocular con la segunda dosis a esta franja de edad no sólo ha sido criticada por los afectados. Ciudadanos (Cs) calificó ayer de «irresponsabilidad» la actuación de Sanidad. Esas eran las palabras utilizadas por Félix Álvarez, coordinador del partido, que además lanzó una pregunta: «¿A alguien en su sano juicio le entra en la cabeza que el 42% del grupo de 60-69 años aún no haya recibido la segunda dosis de la vacuna?». Álvarez considera que esto supone «dejar sin protección» al grupo de edad más sensible en estos momentos y tildó de «temeraria» la actuación del Gobierno de Cantabria que, por otra parte, tiene como objetivo completar durante este mes la inmunización de este colectivo.

Finalmente, Álvarez cargó contra el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, al que calificó de «inútil» porque «no ha sido capaz de adelantarse a ningún acontecimiento durante toda la pandemia».

• Temas
• Gobierno de Cantabria
• Pfizer
• AstraZeneca
• Miguel Rodríguez
• Félix Álvarez
• Cantabria (Provincia)
• Coronavirus
• Vacunas covid-19