La demanda de alojamiento estudiantil recupera los niveles previos a la pandemia

La oferta de este tipo de alojamiento en la región se concentra en Santander, que es donde se ubican los principales centros académicos. La capital cántabra cuenta con varias residencias y un colegio mayor, a los que se suma la oferta de pisos de alquiler, una opción escogida por numerosos estudiantes, especialmente aquellos que ya han realizado los primeros cursos de su formación. En materia de residencias, las más destacadas por capacidad son las de Uneatlántico, con casi 350 plazas, y el Colegio Mayor Torres Quevedo del Campus de la UIMP, con 210. Mientras la primera se encuentra llena y no ha podido atender todas las solicitudes, la segunda tiene cubiertas la mayoría de sus plazas. Los usuarios más habituales son alumnos que vienen a realizar el curso completo. A estas plazas se suman las de la residencia Micampus Santander, la de los Ángeles Custodios y la de las Hermanas Trinitarias en la zona del Alto de Miranda, que suma otras 64 plazas. En todos los casos los precios dependen de las características del alojamiento –tipo de habitaciones y servicios incluidos–, y oscilan entre los 300 y los 900 euros mensuales.

La otra opción de quienes llegan a Cantabria para estudiar es el alquiler de pisos, un segmento en el que Inmobiliaria San Fernando y la plataforma Emancipia son dos de los actores más destacados. Desde de la inmobiliaria cántabra señalan que «la media económica de los alquileres de estudiantes que se realizan son de 600-650 euros mensuales para viviendas de tres habitaciones y 550-600 euros al mes para viviendas de dos habitaciones». En su caso, disponen de un edificio dedicado al alquiler para estudiantes en la calle Perines que cuenta con tres viviendas de cuatro habitaciones y un ático para sumar un total de 15 plazas. Rosa Viota, responsable de comunicación, destaca que este año «ha aumentado tanto la demanda como la cantidad de inmuebles destinados a ese uso», un incremento que cifran «en torno a un 20%» respecto a años anteriores.

Ampliar

En el caso de Emancipia, servicio de alojamiento en pisos utilizado por muchos de los alumnos que llegan a la UC, su responsable, Alfonso Nicholls, destaca que gestionan «71 viviendas con 181 plazas, que van a ocupar unos 270 estudiantes a lo largo de este curso, ya que alguno de ellos solo lo necesitan un cuatrimestre». De ellos, explica, «90 son españoles y 180 extranjeros». La demanda se centra en «habitaciones en piso compartido, pero también se solicitan pisos completos por parte de estudiantes que ya tiene hecho el grupo». En cuanto a los precios, «el coste medio es 250 euros al mes entre el alquiler y los consumos», pero, añade, «sólo la renta de la habitación puede oscilar entre 160 y 400 euros mensuales, y los pisos entre 450 y algo más de 1.000 euros al mes».