Sanidad alivia restricciones a partir del jueves: abre las barras de los bares y amplía los aforos

«Los técnicos de Salud Pública desaconsejan una desescalada brusca», argumentó Rodríguez, en respuesta a los parlamentarios a los que la relajación de medidas les supo a poco –así lo vio el portavoz de Vox, Cristóbal Palacio–, aunque la mayoría aplaudió la decisión. En ese punto el titular de Sanidad recordó que Cantabria aún registra la incidencia acumulada más alta de España, con 85 casos por cada 100.000 habitantes (la media nacional es de 54). No obstante, reconoció que la situación actual, ya lejos de los peores registros de la quinta ola y con más de un 90% de la población vacunable (mayores de doce años) con la pauta completa, «permite dar un paso más» en ese camino hacia la normalización. De no haber sido por el avance de la campaña, la presencia de la variante Delta, causante del 100% de los casos desde el 30 de agosto, «hubiera tenido efectos devastadores».

«Nuestro objetivo es tratar de evitar que la gente se contagie y enferme, evitar hospitalizaciones y aligerar también la carga que soporta el Servicio Cántabro de Salud y sus profesionales tras muchos meses de pandemia», dijo. Por eso, abogó por «seguir manteniendo el cuidado y las medidas de seguridad» en esta nueva etapa hacia el nivel 0, en su día llamado de nueva normalidad. Cuando llegue ese momento, avanzó, desaparecerá el semáforo covid, la herramienta de gestión de las medidas a nivel municipal cuya utilidad volvió a defender, de la misma forma que el portavoz de Ciudadanos, Félix Álvarez, lo volvió a tachar de «inútil». Todo ello mientras aumentan las comunidades que prescinden de las últimas restricciones anticovid (lo han hecho también Castilla-La Mancha, Castilla y León, Navarra y Extremadura), manteniendo únicamente el uso de la mascarilla, «el mejor elemento de protección individual», como recalcó el consejero en su intervención parlamentaria. «Y no seré yo quien recomiende que la quiten», zanjó en contestación a la propuesta de Vox de animar «a la sociedad a desprenderse del miedo inoculado en este año y medio». A este respecto, desde el Grupo Popular, César Pascual reconoció que hay «medidas que ya no tienen razón de ser», dada la evolución de la pandemia, pero coincidió con el consejero en que «la mascarilla en interiores siempre, igual que guardar las distancias y la higiene de manos».

En su exposición sobre la situación epidemiológica, Rodríguez, que volvió a agradecer «el esfuerzo y el compromiso de los profesionales sanitarios, dándolo todo, primero en la asistencia a la pandemia y después con la vacunación», repasó las cifras del covid en Cantabria: los 791.206 test realizados, los 5.169 pacientes ingresados (639 en la UCI) y los 615 fallecidos, de ellos 41 en el contexto de la quinta ola.

«Cada vida que se pierde es un drama y un daño irreparable», dijo, aunque resaltó que «somos la comunidad autónoma con menos sobremortalidad del país, según el informe MoMo del Instituto de Salud Carlos III, que si bien señala seis periodos de exceso de mortalidad en España –con más de 95.000 defunciones por encima de lo esperado–, en Cantabria sólo ha habido uno, con 78 fallecimientos más». Un dato en el que «algo habrá tenido que ver la gestión realizada», opinó. Y sobre esa gestión, precisamente, se habló en el Parlamento. Desde los partidos que sustentan al Gobierno para alabar la labor de la Consejería –«Ha cumplido con su labor y con la diligencia debida», señaló Noelia Cobo (PSOE), de la misma forma que desde el PRC Ana Obregón destacó «el buen avance de la vacunación, escudo esencial de la lucha contra el covid» y celebró la relajación de las medidas «que tanto necesita la sociedad de Cantabria»– y desde la oposición para que «los errores no queden en el olvido». «No lo han hecho todo mal, pero ha habido muchos claroscuros», afirmó Pascual. Y Álvarez, que calificó de «buenas noticias que se aligeren las restricciones» se encargó de recordarlos: «los dos meses iniciales de auténtico caos», «el comité de expertos que no existió» o «el desastre del inicio de la campaña de vacunación».

En esta vuelta a la normalidad, el titular de Sanidad señaló que los hospitales ya han empezado a recuperar la actividad quirúrgica al completo –Tres Mares ha reabierto sus quirófanos después de año y medio–, a sabiendas de que «la pandemia deja una afectación indudable en las listas de espera», que habrá que ir «remontando»; y los centros de salud también recuperan la presencialidad «de forma progresiva».