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Cantabria registró ayer 113 nuevos positivos (lo que supone 32 menos que el martes), hay 174 hospitalizados (cinco menos) y de ellos, 33 están en UCI (uno menos). Es decir, las cifras, «sensiblemente inferiores» al día anterior, sobre todo en el nivel contagios, ... «acreditan una estabilización de la pandemia» en Cantabria después de varios descensos consecutivos en todos los parámetros. Así lo ha asegurado este jueves el vicepresidente regional, Pablo Zuloaga, quien además ha informado de una incidencia acumulada a 14 días de 360 casos por cada 100.000 habitantes (16 puntos menos que la jornada precedente), que confirma a Cantabria como la segunda comunidad con menor incidencia del país, sólo por detrás de Canarias: «Los datos reflejan una tendencia a la baja».
Aun así, la región continúa en el nivel 4 de alerta sanitaria, de ahí que haya municipios confinados, que la comunidad esté cerrada perimetralmente, que siga habiendo toque de queda a las 22.00 horas, que los centros comerciales tengan que echar el cierre los fines de semana... Es decir, aún queda camino por recorrer. Y como decía Revilla hace un par de días: «Mucho cuidado porque la curva está bajando, pero no de manera muy rápida».
Hace una semana el número de contagios superaba los 200 diarios, y ahora han bajado casi a la mitad, pero «no es garantía», ha dicho Zuloaga, porque con el «mínimo descuido» la situación puede cambiar. Como ha ocurrido en la residencia Los Robles, en Mortera (Piélagos),, donde se ha detectado un nuevo brote con siete residentes contagiados, que ya han sido trasladados al centro covid específico de Suances. «Es posible» que puedan detectarse más casos tras el barrido que hizo ayer, miércoles, Sanidad, en esa residencia.
Lo positivo es que los otros tres brotes en los centros de mayores de Puente Viesgo -que alcanzó los 51 contagios-, Bimbiles (Bezana) y Vega de Pas están remitiendo.
En concreto, los casos de coronavirus en las residencias de mayores han descendido en la última semana un 30,7%, de los 202 de hace siete días hasta los 140 en la actualidad entre usuarios (108) y trabajadores (32).
Los datos de Sanidad de las últimas 24 horas suman un fallecido más, una mujer de 58 años, a la cifra total de muertos en Cantabria, que asciende a 476.
Mientras, la ocupación de camas hospitalarias ha descendido un punto con respecto a este pasado miércoles, pasando de un 12,2 a un 11,7% (se ha pasado de 179 a 174 ingresados), así como en las UCI, donde la presión se sitúa en el 28,2% (de 34 a 33 enfermos).
En la actualidad, hay 3.707 personas con el virus activo en la región, de las que la gran mayoría, 3.533, se encuentran en cuarentena domiciliaria. Las 174 restantes están hospitalizadas: 135 en Valdecilla, 22 en Sierrallana y 17 Laredo, mientras el Hospital Tres Mares de Reinosa sigue sin pacientes covid.
En lo que va de pandemia, Cantabria acumula un total de 24.225 contagiados por el virus, de los que se han curado ya 20.042, que representan el 83% del total.
Hasta la fecha, se han realizado 422.401 test, que suponen 72.666 por 100.000 habitantes y la positividad de las pruebas es del 8,2%.
Salud Pública mantiene, de momento, las restricciones adoptadas en los cuatro municipios sobre los que se acordó, hace una semana, el cierre perimetral por la elevada incidencia de casos de coronavirus. Por ahora, no se ha avanzado nada sobre la posible relajación de las limitaciones decretadas en Laredo, Colindres, Santa María de Cayón y Polanco, aunque se estudia esa opción conforme a la evolución de los datos de contagios, que han evolucionado de forma «favorable» en los últimos días.
Y sobre la posibilidad de abrir el tránsito en Cantabria en Semana Santa, opción a la que se ha mostrado favorable el presidente Revilla, Zuloaga ha dicho que es «pronto» para adoptar una decisión y ha pedido ser «muy prudentes». Y se refiere el vicepresidente a la ocupación de camas en hospitales y unidades de cuidados intensivos, que sigue siendo «alta». A ello hay que sumar la presión de los sanitarios, que también es «alta», ya que sobre ellos «recae todo el peso» de la gestión de la crisis del covid.
Cantabria ha cerrado este jueves otras cinco aulas en Infantil y Primaria por casos de Covid, lo que eleva a 46 el total de aulas en cuarentena en este nivel educativo, un 1,77% de las 2.654 existentes.
Además, ha puesto en cuarentena a 18 alumnos, --8 en Primaria y 10 en Secundaria--, tres docentes y un trabajador no docente, según los datos facilitados por la Consejería de Educación.
Las aulas cerradas corresponden a los colegios Esclavas, La Salle y María Sanz de Sautuola de Santander; Valle de Reocín de Reocín; y Santa Catalina de Castro Urdiales.
En cuanto a las cuarentenas, afectan a ocho alumnos del Bajo Pas (Piélagos), por contacto con un positivo no docente; tres docentes del Leopoldo y Josefa del Valle de Riotuerto, por contacto con otro doente positivo; y un trabajador no docente de El Pedregal (Castro Urdiales), por contacto con un positivo no docente.
En ESO, Bachillerato y Formación Profesional, se han establecido cuarentenas para ocho alumnos del centro Torreanaz de Medio Cudeyo, y para dos del Dr. José Zapatero Domínguez de Castro Urdiales.
Por otra parte, en Infantil y Primaria han finalizado los cierres en los colegios Marquesa de Viluma (dos aulas), en Voto; Eugenio Perojo (dos aulas), en Liérganes; Antonio Muñoz y Gómez, en Cabezón de la Sal; Cisneros, en Santander, y De Palacio, en Noja.
Y en el resto de etapas, ha terminado para un aula del José Zapatero Domínguez, en Castro Urdiales, así como las cuarentenas parciales en aulas de los centros La Granja y Apostolado del Sagrado Corazón (Medio Cudeyo); San Miguel de Meruelo (Meruelo); Besaya (Torrelavega); y Bernardino Escalante (Laredo).
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