Examen a diez meses de Gobierno Buruaga: el cambio llega más lento de lo prometido

El balance. Se resume en tres palabras: la herencia recibida. Solo ha continuado los grandes proyectos de la legislatura anterior, como La Pasiega o el Mupac, garantizados gracias a la generosidad del PRC al permitir la investidura y apoyar el Presupuesto de 2024. En contra de la promesa de la presidenta de resolver todos los problemas en cien días, Cantabria no va por el buen camino y los datos lo demuestran. El paro, la industria, la situación sanitaria, la falta de interlocución con Madrid...

Lo mejor. Los acuerdos con el PRC para dar continuidad a proyectos, asegurar las políticas y obras municipalistas o la extensión de la rebaja fiscal a clases medias.

Lo peor. La falta de reivindicación ante el Estado y la ausencia de ideas para afrontar los problemas que empiezan a multiplicarse. Ha demostrado muy poca capacidad de trabajo y no ha puesto en marcha ni un solo proyecto propio.

Principales retos. Reducción de las listas de espera y médicos en los consultorios, ejecución del Plan Anti-inflación para apoyar a los autónomos y a las familias, convocatoria urgente de las ayudas al sector primario, ayudas efectivas a la gran industria y defensa de una financiación autonómica

El balance. El Gobierno de Buruaga no está haciendo lo que debe, y eso tiene consecuencias directas: el paro aumenta y la economía se estanca. Se centra en la confrontación con Madrid mientras paraliza los proyectos que son de su responsabilidad como con La Pasiega y La Lechera, dos obras empantanadas por falta de responsabilidad de Buruaga. Cantabria no está siendo atendida mientras el PP nos hace perder oportunidades. En este tiempo ha demostrado que Buruaga no tiene proyecto para el futuro de Cantabria.

Lo mejor. El Gobierno de Buruaga ha demostrado su verdadera cara. Llegaron para subirse el sueldo, trabajar poco y bajarse los impuestos. Privatizan y recortan.

Lo peor. La parálisis y la falta de gestión de la presidenta. Convertida en embajadora de Génova 13, es capaz de defender que las pensiones no crezcan o que el salario mínimo no aumente mientras desatiende los proyectos de Cantabria.

Principales retos. El PP debe dejar a un lado la crispación y los insultos y desarrollar políticas con las que generar industria, empleo y más economía, desarrollando la ley de ciencia o garantizando servicios públicos de calidad que sean garantía de igualdad.

El balance. Sin duda, estamos viendo a un Partido Popular que está defraudando a los cántabros, ya que estos eligieron echar al PRC y lo primero que hicieron fue pactar la investidura de María José Sáenz de Buruaga con ellos. Estamos ante un pacto PP-PRC que se resume en no investigar lo sucedido en el 'caso Obras Públicas'. Si los populares decían que Revilla y Sánchez son lo mismo, ahora han demostrado que los populares también lo son. Los pocos aciertos del PP en esta legislatura han llegado de la mano de Vox, como sucedió cuando se sacó adelante la derogación de la Ley de Memoria Democrática impulsada por PRC-PSOE.

Lo mejor. Que el PP aprobó junto a nosotros la derogación de la mal llamada Ley de Memoria Democrática.

Lo peor. Que Buruaga está vendida al PRC y sus postulados para mantenerse como presidente, es decir, tenemos más políticas de izquierdas que dan continuidad a la etapa del bipartito entre regionalistas y socialistas.

Principales retos. Defender y proteger nuestro sector primario, romper con la Agenda 2030 y reindustrializar Cantabria, especialmente las comarcas de Campoo y la zona del Besaya.

El balance. Cantabria estaba paralizada y ahora ha pisado el acelerador. Hemos aportado estabilidad política y social. Antes el diálogo era una opción, ahora el acuerdo es una norma. Hemos aprobado la mayor reforma fiscal, salvado nuestra sanidad con la aprobación de un plan para reducir listas de espera y retomando el diálogo con el profesional. Hemos cambiado la Ley del Suelo para luchar contra la despoblación y aprobado el I Plan de Apoyo al Autónomo, blindando los servicios esenciales y centrándonos en la atención a las personas.

Lo mejor. Cumplir con la palabra dada a los cántabros, bajando todos los impuestos sobre los que tiene competencia el Gobierno de Cantabria. Crearán empleo y riqueza.

Lo peor. El castigo permanente que supone para los cántabros la permanencia de Pedro Sánchez en La Moncloa.

Principales retos. Aprobar una ley de simplificación administrativa para reducir la excesiva burocracia, dinamizar la construcción de vivienda pública, fomentar el empleo joven y para mayores de 45 años y luchar contra la despoblación. Y por supuesto, conseguir que el Estado cumpla con las obras pendientes y saque al lobo del Lespre.

El balance. Hay un cambio de actitudes y una mayor sensibilización con las necesidades del empresariado. Se ha plasmado en algunas medidas, pero también falta impulso para poner en marcha el programa de Gobierno con el que Buruaga ganó las elecciones.

Lo mejor. La accesibilidad, el alineamiento del actual Gobierno de Cantabria con las prioridades empresariales, el liderazgo en asuntos como la rebaja fiscal y la voluntad de la presidenta y su equipo para cambiar el ritmo de la región.

Lo peor. Apreciamos que existe una falta de concreción y un retraso en la puesta en marcha de decisiones y acciones concretas, como la simplificación administrativa o la regulación de las viviendas turísticas de la región.

Principales retos. A corto plazo, lo que tiene que lograr el Ejecutivo de Buruaga es ser más productivo y poner en marcha su programa de gobierno. Además, debe conseguir una mayor efectividad en las reivindicaciones ante el Gobierno central en asuntos como la igualdad entre comunidades, infraestructuras o conectividad. Un ejemplo claro es la estación intermodal de La Pasiega, que depende del Estado y todavía está pendiente de confirmación.

El balance. El balance es positivo. El Gobierno está en contacto directo con los sectores sociales y económicos de la región, donde la gestión de los problemas reales de la gente y las empresas ocupa el tiempo y la atención, al mismo tiempo que se ponen en marcha planes para revertir las tendencias negativas.

Lo mejor. Aprobar una rebaja fiscal histórica que disminuye todos los impuestos para impulsar el consumo familiar y la inversión empresarial, o el Plan de Apoyo al Empleo Autónomo con medidas para impulsar su actividad.

Lo peor. La falta de concreción y compromiso por parte del Gobierno central a las reivindicaciones en materia de infraestructuras y comunicaciones.

Principales retos. Conseguir compromisos claros por parte del Estado, tanto de financiación como de ejecución, en todo lo relacionado con las conexiones ferroviarias pendientes. Incluida la estación ferroviaria de La Pasiega, que permitirá el crecimiento del Puerto y de su competitividad.

El balance. Consideramos que, visto lo que va de mandato del nuevo Gobierno, queda mucho por hacer. Esta Junta presentó al inicio del curso escolar una veintena de reivindicaciones para ponerse a trabajar en la mejora de las condiciones laborales de los docentes y de la enseñanza pública. Incluyen muchos asuntos, desde la reducción de la carga de horario lectivo hasta la eliminación de las unidades privadas concertadas o la cobertura diaria de todas las vacantes.

Lo mejor. Se han dado pasos. Hemos establecido un cronograma de negociación entre los que se incluyen importantes reivindicaciones como la bajada de ratios, la regulación del teletrabajo, la atención a la diversidad, la escuela rural o la reducción de la carga burocrática del profesorado.

Lo peor. Urgimos a la administración a convocar cuantos antes la mesa de negociación para poder acordar.

Principales retos. En octubre comenzamos una campaña de adecuación salarial que cuenta con amplio apoyo de los profesionales docentes.

El balance. Muy positivo. Destacaría el diálogo fluido entre el Gobierno y la Federación, con reuniones de cada consejero con todos los alcaldes para explicarnos la hoja de ruta desde la cercanía y poder resolvernos las dudas de manera personal. En cuanto a las medidas, destaco la bajada de todos los impuestos a todos los cántabros, sobre todo a las mujeres, jóvenes y municipios en despoblación.

Lo mejor. La bajada de impuestos y la construcción de vivienda unifamiliar en suelo rústico, algo que hemos pedido todos los alcaldes. Esa combinación beneficia de una manera impresionante a los municipios pequeños.

Lo peor. Las dificultades para mejorar las comunicaciones (Cercanías, AVE, autovías…) y los problemas para reflotar la sanidad que se encontraba en una de las peores situaciones que yo recuerdo.

Principales retos. Espero que el plan de reducción de listas de espera dé frutos cuanto antes. Sacar al lobo del Lespre y avanzar en la simplificación administrativa.

El balance. Tiene claroscuros: muy buenas palabras, pero la realidad a veces es mucho más complicada. Así, hemos visto cómo detrás de resoluciones judiciales muy cuestionables puede haber la tentación de hacer como siempre: que pase el tiempo para no poner los recursos necesarios que resuelvan el grave problema creado. Hay que recordar que, en el caso de los derribos, los han causado quienes están condenados, el Gobierno y los ayuntamientos implicados.

Lo mejor. Para AMA ha sido cuando nos recibió Buruaga el pasado agosto y sus palabras de apoyo a las cientos de familias afectadas por los derribos.

Lo peor. Ver cómo pasa el tiempo y no se resuelven los problemas. La desesperación de tantas personas y la injusticia que aumentan cada día.

Principales retos. El Gobierno de Cantabria que preside María José Sáenz de Buruaga tiene que cumplir con los compromisos y promesas adquiridas en sede parlamentaria cuando el PP estaba en la oposición. Pero una cosa es prometer y otra dar trigo.

El balance. En estos meses, los ganaderos se han enfrentado a retos significativos debido a enfermedades emergentes como la hemorrágica epizoótica y la lengua azul. Por otro lado, la implementación de la nueva PAC ha presentado obstáculos administrativos complejos a los ganaderos y ganaderas, afectando a la gestión de las explotaciones y a su economía.

Lo mejor. Se han mantenido numerosas reuniones. Además, se ha presentado un Plan de Choque que esperemos que dé frutos lo antes posible.

Lo peor. La excesiva burocracia asociada a la nueva PAC ha sido un punto crítico. Instamos a reforzar los servicios técnicos de la Consejería para asegurar que las ayudas lleguen en tiempo y forma. Se requiere más determinación en el tema del lobo.

Principales retos. Es esencial simplificar la burocracia de la PAC y garantizar partidas para nuevas enfermedades y para paliar la reducción de la PAC que llega desde Europa. Y más colaboración con los agentes del sector para una gestión agraria eficiente.

El balance. La opinión es parcial porque acabamos de empezar a trabajar juntos. La primera reunión fue en septiembre. Este Gobierno ha conseguido que se pongan en marcha las acreditaciones profesionales en el sector pesquero, que es lo que puede garantizar el relevo generacional. El anterior Gobierno lo comenzó y el actual lo ha culminado con 90 personas que han participado en los cursos para completar algunas asignaturas.

Lo mejor. La culminación de las acreditaciones profesionales y el apoyo para que empiece a funcionar el Centro Marítimo de Formación de Laredo al que Costas ponía pegas.

Lo peor. No ha sabido hacer oír la voz del sector en Madrid para trasladar nuestras reivindicaciones. La secretaria general de Pesca ha visitado todas las regiones menos Cantabria.

Principales retos. La burocracia la tiene que reducir el Ministerio, no Cantabria, pero sí debe convertir los fondos europeos en ayudas y realizar una campaña de promoción del pescado ante la caída de las ventas.

El balance. Vuelta al pasado. Se han recuperado proyectos que fueron desechados por obsoletos o agresivos. Hay que recordar que en 2001 el PP estaba en contra de la construcción de vivienda unifamiliar en suelo rústico. Hay una vuelta atrás en Obras Públicas recuperando la idea de la carretera Reinosa-Potes. La filosofía en los años 90 en Cantabria era apostar por la naturalización y conservación como atractivo económico y turístico (Liébana lo hizo bien) y ahora se hace lo contrario con proyectos como el teleférico de Vega de Pas. Cantabria fue referente en conservación para los territorios vecinos y ahora es al revés. Buruaga profundiza en el modelo de Revilla.

Lo mejor. No sabría destacar nada.

Lo peor. Es un Gobierno sin complejos que apuesta por el retroceso en la protección territorial y por el desarrollismo. Volvemos a Hormaechea.

Principales retos. Potenciar el sector agropecuario y forestal más allá de la vaca y la leche. Potenciar la industria de cercanía y sostenible que ningún gobierno se ha tomado en serio.

El balance. El Gobierno tiene claro que la región necesita energía eólica porque es la única fórmula para que las renovables avancen en nuestra tierra. Se ha mostrado diligente para sacar adelante las tramitaciones gracias a las cuales existen siete proyectos con posibilidades de hacerse realidad. El actual Gobierno es perfectamente conocedor de los esfuerzos que asumimos los promotores.

Lo mejor. La determinación para sacar proyectos adelante que sean interesantes para la región. Hay voluntad de dar curso a los proyectos viables y con declaración ambiental favorable.

Lo peor. Cantabria sigue muy por debajo de la potencia prevista para nuestra región, ya de por sí a la cola de España. La tramitación sigue siendo lenta. Aún no ha generado suficiente consenso público sobre lo relevante de generar energía renovable.

Principales retos. No bajar la guardia en la agilidad de los trámites y hacer frente a quienes usan la normativa de manera torticera para dificultar el desarrollo eólico legal.