Cabárceno se tiñe de blanco

Cantabria se ha despertado hoy tiritando de frío (sobre todo en el sur de la región y Liébana, con temperaturas de -2 grados) y bajo una lluvia que, en algunos lugares, se ha convertido en agua nieve y copos a nivel del mar. Esta mañana, además, esta ha sido la Comunidad donde más ha llovido, con cuatro localidades entre las diez de toda España con más precipitación acumulada, aunque las cantidades recogidas no son muy reseñables.

Santander, por ejemplo, ha acumulado 1,8 litros por metro cuadrado, de momento -muy lejos de lo recogido en Escorca (Mallorca), que han sido 7,2 litros-. Fuente Dé y Alto Campoo han sido otros puntos donde ha llovido muy por encima del resto de España.

Lo realmente noticiable de este miércoles son las temperaturas, cuyos bajos valores han permitido a muchos cántabros que viven al nivel del mar ver copos de nieve a su alrededor, si bien la mayoría de los episodios han pasado rápido. Alto Campoo ha repetido, al igual que el lunes, los 8 grados bajo cero, Fuente Dé se ha quedado con -7,6 grados y en San Roque de Riomiera, Cubillo de Ebro (en Valderredible) y Tresviso han marcado dos grados a tres bajo cero esta madrugada. A todo esto hay que unir que el viento ayuda a que la sensación térmica sea aún menor. Santander ha apuntado rachas de 44 kilómetros por hora y Alto Campoo de 43 (a gran distancia de los 101 km/hora que se anotó el lunes).

Y es que este miércoles va diciendo adiós la borrasca Juliette, que ha azotado con sus armas árticas a todo el norte de la península, pero no se va sin dejar detrás un rastro de cielos plomizos y unas mínimas sin cambios. La previsión de Aemet (Agencia Estatal de Meteorología) dice que las lluvias cesarán este miércoles por la tarde en la costa y que la cota de nieve irá subiendo, pero las temperaturas mínimas seguirán en los valores muy bajos de estos días atrás. En el interior de la región, para rematar, soplarán vientos de componente norte.

Las condiciones meteorológicas siguen afectando a las carreteras y autovías en los puntos críticos de siempre: la A-67 está transitable (11.30 horas) a la altura de Pesquera aunque se pide precaución hasta el límite con Palencia, en ambos sentidos. Los puertos de Estacas de Trueba y Lunada siguen cerrados por la nieve este miércoles, en el que ha mejorado ligeramente la situación de las carreteras en Cantabria, donde solo son necesarias cadenas en un tramo de la red secundaria, en la CA-280.

En la nacional N-621, a la altura de Vejo, entre los puntos kilométricos 121,8 a 127, en ambos sentidos, sigue prohibida la circulación de camiones y articulados, pero ya se permite la de autobuses y no se requieren cadenas. También está cerrado al tráfico un tramo entre Vega de Pas y Estacas de Trueba y un tramo más entre Roque de Riomiera al Puerto de Lunada. Mientras, se necesitan cadenas para circular por la CA-280, entre el valle de Cabuérniga y Espinilla y Salcedillo.