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Cuando el covid entró en escena de forma explosiva, la gripe prácticamente desapareció. A medida que fue superándose la pandemia –y las medidas de contención aplicadas de forma generalizada se fueron levantando– el virus gripal fue recuperando presencia pero con «un patrón raro», con más ... de un pico el mismo año e incluso contagios en pleno verano. Sin embargo, esta temporada ya se puede decir que es como las de antes. «No habíamos tenido una onda epidémica clara de gripe desde que llegó el covid», sostiene Luis Viloria, jefe de Vigilancia Epidemiológica de Salud Pública. Y la actual ya es, por tanto, la más intensa de estos últimos cuatro años, al alcanzar una tasa de incidencia de 307 casos por cada 100.000 habitantes, y eso que «aún no ha parado de subir». «No podemos predecir en qué nivel se llegará al pico, porque eso lo vemos a posteriori, cuando los contagios se empiezan a frenar, pero no es descartable, al ritmo que va, que se lleguen a los 400 casos por 100.000 habitantes», añade.
«Según el patrón clásico, son cinco o seis semanas de subida rápida de contagios, y llevamos cuatro. Así que calculamos que hasta comienzos de enero, prácticamente pasada la fiesta de Reyes, no empezará a descender la propagación del virus», sostiene el técnico de la Consejería. En todo caso, aclara que «no está pasando nada que no entrara dentro de lo que podíamos esperar, no es algo excepcional».
Higiene de manos Lavados frecuentes con agua y jabón para evitar el traspaso de virus
Protección Cubrirse el estornudo y la tos con el pliegue del codo, nunca con la mano.
Prevención Evitar el contacto con personas vulnerables en caso de padecer síntomas
Más medidas Es conveniente ventilar a menudo los espacios y usar pañuelos desechables
La novedad es que la gripe ha recobrado el protagonismo perdido.Sólo la semana del 18 al 24 de diciembre se notificaron 1.812 contagios, un 41% más que la anterior. Y eso teniendo en cuenta únicamente los pacientes que han llegado a pasar por el médico. Los que tienen el diagnóstico confirmado, que desde el 1 de octubre suman 5.381.
Aunque pasando sus molestos síntomas, hay muchos más. De la misma forma que estamos rodeados de congestiones, cuadros febriles y catarrales que tienen como responsables a otros virus, que no son gripe. Yel del covid es uno de ellos. 434 positivos se confirmaron la última semana, un balance que «no es tan importante en comparación», pero que supone también un aumento del 22% respecto a la semana precedente. Por este motivo, constan en estos momentos 40 hospitalizados en Cantabria, mientras que los ingresos que sí han caído de forma notable son los derivados del Virus Respiratorio Sincitial (VRS), en consonancia con la propia evolución del principal causante de la bronquiolitis infantil.
Los contagios por VRS, cuya onda epidémica es más corta (un mes) que la de gripe, «han bajado un 40% en la última semana, en la que se detectaron 43 casos». Y con ello, los pacientes hospitalizados por sus complicaciones, que se reducen a siete. En cambio, los ingresos por gripe siguen al alza. Hasta 76 personas acabaron hospitalizadas la semana pasada –el 73% de ellos mayores de 65 años y cinco menores de tres años–.
Viloria cifra en un 25% los casos graves, aunque ninguno precisó traslado a UCI. Las infecciones respiratorias mantienen así la presión sobre el sistema sanitario. Si el pasado sábado los SUAP alcanzaron su récord anual de consultas médicas en un solo día, el 26 de diciembre era Valdecilla el que alcanzaba su pico máximo de urgencias, con 496 de adultos y 123 de niños.
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