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La borrasca Ivo, a pesar de que va reduciendo su fuerza, sigue dejando incidencias en Cantabria, como la caída de un árbol sobre la catenaria que ha interrumpido la circulación entre San Pedro de Rudagüera y Casar de Periedo, de la línea de ancho métrico Santander-Cabezón de la Sal poco después de la una del mediodía. Poco después, Adifil informaba de que la circulación quedaba restablecida y que línea afectada recuperaba gradualmente sus frecuencias habituales.
Una vez retirado el árbol, se reanuda la circulación entre San Pedro de Rudagüera y Casar de Pariedo. Los trenes de la línea afectada recuperan gradualmente su frecuencia de paso habitual.
— INFOAdif (@InfoAdif) January 30, 2025
Desde esta madrugada el viento huracanado (se considera así cuando supera los 120) sopla intensamente en Cantabria a una velocidad de 121 kilómetros por hora -la mayor racha, según Aemet- en San Roque de Riomiera, donde también se ha registrado la cifra más elevada por acumulación de precipitaciones: 90 litros por metro cuadrado.
El Centro de Atención a Emergencias 112 del Gobierno de Cantabria ha coordinado, entre las tres de la madrugada y doce de este mediodía, un total de 64 incidencias derivadas de 164 llamadas relativas a las alertas activas hoy en toda la región. El viento está detrás de la mayor parte de esas llamadas ciudadanas al 112, pero también han entrado reclamos por nieve, por el estado de las carreteras autonómicas y por lluvia intensa.
En su mayoría, los daños se están registrando en la zona litoral, con avisos por caída de árboles y ramas; desprendimiento de piedras; desperfectos o desplazamiento de mobiliario urbano o señalética, y la afección en infraestructuras (canalones, ventanas, tejas...).
Alero de nave con riesgo de desprendimiento en Adal-Treto. Bomberos @cantabriaes lo retiran para evitar riesgos. pic.twitter.com/EjbHRkyttv
— 112 Cantabria (@112Cantabria) January 30, 2025
Además, la borrasca ha provocado la caída de otro árbol sobre el tendido eléctrico de Viesgo en Piélagos y el corte de luz ha afectado a más de 2.000 vecinos en Barcenilla, parte de Oruña, Quijano, un barrio de Puente Arce y un área de Renedo de Piélagos. En concreto, los barrios San Antonio y Sorribero. Allí hay un colegio que amaneció sin energía eléctrica, al igual que el alumbrado público, pero el servicio ya está restablecido.
Desde primera hora de la mañana, Viesgo estuvo en la zona arreglando la avería. El suministro quedó totalmente restablecido antes de las 15.00 horas. El alcalde Carlos Caramés, que rige un municipio con cerca de 27.000 vecinos, se puso en contacto con la empresa en cuanto empezó a recibir avisos de residentes que echaban en falta el alumbrado en las calles pensando que era un problema del Ayuntamiento.
Viesgo se había dado cuenta de que se había roto un cable de la línea media a las 05.30 horas de la madrugada y enseguida envió a un equipo de técnicos para reparar los desperfectos ocasionados por el viento. Como vieron que el fallo podía ir para largo usaron equipos especiales para dar corriente mientras restablecían la línea de forma sólida. El problema quedó zanjado a primera hora de la tarde.
Una de las incidencias más aparatosas se ha registrado de madrugada en Pesués, en el polígono industrial, donde el cartel del supermercado Lupa ha salido volando por el fuerte viento. No ha habido que lamentar daños personales, la caída tampoco ha provocado desperfectos en vehículos cercanos, y a primera hora de la mañana operarios retiraron los restos del rótulo.
Cartel publicitario caído en #Pesués #ValDeSanVicente. Bomberos @cantabriaes aseguran y balizan el letrero en el suelo, y eliminan elementos con riesgo de desprendimiento de la parte superior del mástil. pic.twitter.com/2ZEVAuEJj7
— 112 Cantabria (@112Cantabria) January 30, 2025
Cuatro tramos de ríos cántabros están en observación de niveles por acumulación de lluvia en las últimas horas -llego a haber hasta siste en la mañana-, según datos de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico. Se trata de los tramos los de Fresneda y Puente de Ruente, en el Saja y de Gándara y Ramales de la Victoria, en el Asón. Durante unas horas tambien estuvieron los de Puente Pumar y de Rábago en el Nansa y el de San Lorenzo en el Pas.
El caudal de todos estos tramos se mantienen en parámetros normales.
La carretera de acceso a Alto Campoo, la CA-183, Reinosa-Brañavieja, es la única que necesita cadenas este jueves en la red secundaria de Cantabria, mientras en la principal, es transitable con precaución el tramo de la autovía de la Meseta, A-67, entre Hormiguera (kilómetro 118) y Matamorosa (kilómetro 133), en ambos sentidos, por la meteorología adversa.
En concreto, en la CA-183, se precisan desde el punto kilométrico 14 al 24, según información de la Red de Carreteras de Cantabria, que además pide precaución por nieve y hielo para circular por el puerto de Lunada, en la CA-643, entre el kilómetro 6 y 14.
La Cantabria del Ebro está en aviso amarillo (riesgo) por nieve durante toda la jornada, por acumulaciones de hasta cinco centímetros, por encima de los 1.000 metros. En esta zona, la estación de esquí de Alto Campoo está cerrada por condiciones meteorológicas adversas.
La borrasca Ivo, la novena de gran impacto de la temporada (24-25), ha tomado el relevo con fuerza a su antecesora Herminia, pero con dos grandes novedades: mucha más lluvia que estos días y nevadas en Liébana. «Tenemos de todo: toda la comunidad en amarillo por viento, costeros, precipitaciones y nieve. Y ojo, aún se pueden activar nuevas alertas por mal tiempo», ha señalado Arcadio Blasco, delegado territorial de la Aemet en Cantabria. Y así es porque esta mañana se sumó un nuevo aviso naranja por oleaje entre las dos y las ocho de la tarde.
La lectura positiva es que a partir del viernes las previsiones apuntan a una leve mejoría, con chubascos muy dispersos y ligero aumento de las temperaturas. «Puede haber precipitaciones a lo largo del fin de semana, pero algo débil, debido a que se va Ivo y se espera una tendencia a la estabilizacion en la península por la entrada de altas presiones por el oeste. De modo que a partir de ese día será más estable», avanza Blasco.
Precipitaciones localmente fuertes y persistentes en el centro, y Liébana, donde puede haber acumulaciones de nieve que pueden alcanzar los 10 cm de espesor. Rachas muy fuertes de viento del noroeste. Máximas de 14 grados y mínimas de -1 en Reinosa y 10 en Santander.
Intervalos nubosos. Sin descartar alguna precipitación de madrugada. Temperaturas mínimas en descenso y máximas en ligero ascenso. Heladas débiles en la Cordillera. Viento flojo variable. Máximas de 14 grados y mínimas de -4 en Reinosa y 9 en Santander.
Intervalos de nubes. Temperaturas mínimas con pocos cambios; las máximas en ascenso, que será ligero en el litoral. Heladas débiles en la Cordillera. Viento flojo variable, con predominio de la componente sur. Máximas de 14 grados y mínimas de -4 en Reinosa y Potes y 6 en Santander.
Intervalos nubosos. Sin descartar alguna precipitación de madrugada. Temperaturas mínimas en descenso y máximas en ligero ascenso. Heladas débiles en la Cordillera. Viento flojo variable. Máximas de 14 grados y mínimas de -4 en Reinosa y Potes y 4 en Santander.
El mal tiempo para hoy es una réplica del pasado martes. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) volvió a activar la alerta roja (de seis de la madrugada a dos de la tarde) por fenómenos costeros. También en mar de fondo y nuevamente fuera de las pleamares, previstas para las 04.59 y 17.23 horas, por lo que no se han producido grandes destrozos en los paseos de costa. Aun así, «siempre precaución ante riesgos extremos», apunta el delegado territorial. El aviso ahora es de nivel naranja hasta las ocho de la tarde. Además, toda Cantabria está en aviso amarillo por rachas de viento que pueden superar, como así ha sido en San Roque de Riomiera, los 90 kilómetros por hora.
A esta jornada gris hay que sumar los avisos amarillos por precipitaciones intensas con acumulaciones de hasta 60 litros por metro cuadrado en 12 horas en Liébana, centro y Valle de Villaverde y la alerta por nevadas con un espesor de 10 centímetros también en Liébana, pero en altitudes superiores, a unos 1000-1.100 metros.
El Ayuntamiento de Santander ha desactivado la fase de preemergencia del Plan de Emergencias municipal (PEMUSAN) como consecuencia del temporal marítimo, una vez que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha rebajado el nivel rojo (riesgo extremo) a nivel naranja.
El concejal de Protección Ciudadana, Eduardo Castillo, ha explicado que, desde las 14.00 horas de este jueves, el litoral santanderino se encuentra en aviso de riesgo importante con previsiones de mar combinada del noroeste y olas de 6 a 8 metros, disminuyendo hasta los 5 metros.
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