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daniel martínez | ana del castillo | pedro álvarez
Jueves, 31 de marzo 2022, 13:54
Entre halagos y miradas cómplices, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, que ha visitado la comunidad autónoma este jueves, y el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, han soltado, sacando pecho, el anuncio de las obras de mejora de la carretera del Desfiladero de la ... Hermida «para el mes que viene». En concreto, «después de los festivos de Semana Santa» para no entorpecer el tránsito de turistas. Sin embargo, para quienes llevan 40 años viendo promesas sin cumplir, proyectos que quedan en cajones y pequeñas actuaciones en la N-621, el anuncio «no es para estar orgullosos».
«Esto es el cuento de nunca acabar, la gente está muy mosqueada. Es una obra que se espera desde hace años y como ha habido tantas trabas hasta que no estén las máquinas en el desfiladero no nos lo creemos», señala Luis González, vecino de Liébana.
La misma expresión emplea el alcalde de Potes, Javier Gómez, que se ha enterado por este periódico de las previsiones de la obra: «Ahora dicen que después de Semana Santa, pero es que ya habían anunciado que sería en las navidades pasadas», cuenta Gómez. El regidor ha tenido que ver cómo desde que se licitaron las obras hasta que se firmó con la empresa adjudicataria -«hace 15 días», señala- han pasado cinco meses: «Solo faltaba que después de todo este tiempo para una firma tarden otros tantos meses en comenzar las obras. Más retrasos ya no tienen sentido», señala.
«Después de Seman Santa ya es casi verano. ¿Van a hacer obras con la cantidad de turistas que suben y bajan por del Desfiladero?», se pregunta otro vecino de la zona, que prefiere no desvelar su nombre.
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La mejora e integración ambiental de la N-621 a su paso por el Desfiladero de La Hermida fue adjudicada por importe de 73,4 millones. En junio de 2021, Sergio Vázquez, secretario general de Infraestructuras del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) anunció la reforma integral a las autoridades regionales y comarcales presentes en un acto en Urdón. Después de la licitación de la obra, se ha adjudicado la obra de forma definitiva, «por lo que las actuaciones podrían dar comienzo a inicios de 2022», anunciaron. Hasta hoy.
La mejora de la N-621 comprende un tramo de la carretera entre el punto kilométrico 154,5 de Castro Cillorigo (Cantabria) y el 174,5 de Panes (Principado de Asturias). La carretera contará con dos carriles de 3 metros, arcenes de 1 metro, cunetas de 0,50 metros y 0,50 metros de sistemas de contención.
Con las obras previstas se pretende garantizar la accesibilidad, mejorar la seguridad vial y asegurar la continuidad de la circulación, principalmente, salvando los valores medioambientales de un entorno único.
Fue en mayo de 2015 cuando salió a licitación el proyecto de acondicionamiento parcial de la carretera, que incluía la mejora de seis tramos, en 2,8 kilómetros, en los que se iban a rectificar curvas y actuar en los cuatro puentes sobre el río Deva. En el 2017 se iniciaron las obras en el puente de Lebeña, realizando también voladizos en varios puntos y labores de asfaltado, colocándose el último puente en junio de 2018, pero a principios de 2019 las obras se paralizaron.
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