Un ojáncano suelto en Fitur

El ojáncano no está solo en Madrid. La figura –apoyada sobre una base de 1,20 por 1,80 metros– está acompañada por otras cuatro. Una anjana, un nuberu, un trasgu y un musgosu se reparten por diferentes puntos del estand que Cantabria estrena este año. Se trata, según explicaron desde el Ejecutivo, de unas creaciones de la firma 'Alegría Tiempo Libre' y que se centran en los personajes de la mitología regional.

Más allá de la anécdota, la primera jornada –la reina Letizia fue la encargada de inaugurar la edición número cuarenta de Fitur– sirvió para las primeras presentaciones y encuentros de trabajo. La consejera de Educación, Formación Profesional y Turismo, Marina Lombó, mantuvo reuniones con representantes de las compañías Vueling, Volotea y Binter, además de con Iberia Express e Iberia. Con esta última se firmó «un protocolo de intenciones en el que ambas partes se comprometen a promocionar, a corto y medio plazo, la afluencia de turistas y visitantes a Cantabria, tanto desde España como desde resto del mundo». Un acuerdo que debe materializarse en acciones concretas próximamente. La reunión con Vueling, por su parte, sirvió para anunciar que la compañía operará desde abril dos frecuencias al día (dos vuelos de ida y otros dos de vuelta) de lunes a viernes (ahora realiza la doble frecuencia sólo dos días a la semana). «Una de las claves para convertirnos en un destino turístico más internacional y aumentar el número de viajeros extranjeros es facilitar la accesibilidad a través de las conexiones y en ello estamos trabajando», aseguró la consejera, que no perdió la oportunidad de recordar el récord de pasajeros logrado por el aeropuerto durante el año 2019.

En cuanto a las presentaciones, el día se abrió en el espacio cántabro con la de la 'Gran Fiesta del Sobao y la Quesada', que celebrará su cuarta edición del 9 al 12 de abril en Vega de Pas. El acto contó con la presencia del hombre del tiempo de Antena 3, Roberto Brasero, nombrado embajador de ambos productos el pasado año.

La gastronomía, de hecho, fue el plato fuerte –nunca mejor dicho– del primer día. Talleres sobre los caricos del Casar y la leche frita a cargo de la Escuela de Hostelería del IES Besaya, degustación del vermú cántabro de Óscar Solana o de las anchoas de Conservas Emilia. Pero, sobre todo, lo fue por la presencia del cocinero con tres estrellas Michelin de Cantabria, Jesús Sánchez, que presentó junto a Lombó y la alcaldesa de Santander, Gema Igual, el encuentro 'Santander Foodie', que celebrará su segunda edición en otoño. La cita, para amantes de la gastronomía e íntimamente relacionada con su promoción en redes sociales, pretende «ser más potente» en 2020, tal como adelantó Sánchez.

El Parque Geológico Costa Quebrada, que aspira a convertirse en Geoparque de la Unesco, o las actividades del Fluviarium de Liérganes –se anunció la ampliación de acuarios, nuevas zonas de exposición y la creación de un albergue– tuvieron también su espacio este miércoles. Lo mismo que el Rallye Festival Valles Pasiegos, que reunirá en mayo a ochenta equipos de nueve países distintos, o la prueba ciclista 'La Cantabrona' (18 de abril), que contará con cerca de 2.000 participantes en la salida.