Los pasajeros de la línea Santander-Bilbao paran el autobús porque una persona se negaba a llevar mascarilla

Según el relato del Illa, al ver el comportamiento del individuo, el resto de los viajeros se plantó y obligó a detener transporte. Pese a la insistencia de sus compañeros de trayecto, el infractor se negó a ponerse la mascarilla por lo que se dio aviso a la policía. Los agentes se personaron en el lugar y desalojaron al hombre, momento en el que el autobús siguió la marcha.

«No tuvo que hacerlo el conductor, sino que fueron ellos los que obligaron a detener la marcha», contó el ministro que puso el caso como ejemplo de responsabilidad ciudadana ante el coronavirus. Como ha dejado claro Illa, «la evolución de la pandemia está siendo favorable, pero estamos muy lejos de donde queremos llegar: 25 casos por 100.000 habitantes. Por eso apelamos a extremar las medidas de precaución y a la solidaridad».