El PRC teme que «sea el primer paso para cerrar consultorios» y el PSOE pide «dar marcha atrás»

Para los regionalistas, con esta medida el Ejecutivo «echa balones fuera» y «deja en manos de los municipios toda la responsabilidad de los traslados, cuando es él quien impone los cierres». Por ello, reivindican «un cambio de prioridades», para que «la carencia de profesionales y la atención de situaciones eventuales no se realice siempre a costa de la asistencia en los pueblos».

A su juicio, la atención médica en los consultorios debe ser «una prioridad permanente» y, en aquellos casos extraordinarios en los que no sea posible, la obligación del Ejecutivo pasa por «asegurar un mínimo de atención presencial, dado que es un servicio fundamental para la salud y el bienestar de la población rural, más vulnerable, mayor y sin medios de transporte a su alcance».

Desde el PRC insisten en que la solución a los problemas de la sanidad cántabra «debe empezar a aplicarse en los pueblos y no a su costa» y la financiación del servicio de transporte «no es más que un parche» que evidencia «falta de compromiso con la población rural y la necesidad de reactivar las políticas de lucha contra el despoblamiento que paso a paso está abandonando el PP».

Asimismo, piden mejoras en el servicio de enfermería de los consultorios y la dotación de un sistema de análisis clínicos comparable al de los centros de salud, para garantizar «una atención más completa, que facilite el diagnóstico y un tratamiento rápido y eficaz». Por otro lado, los regionalistas expresan su acuerdo con la propuesta del PP de flexibilizar los requisitos que se exigen a los MIR de último año y facilitar su labor en los centros con déficit de médicos, aunque advierten contra una posible precarización del trabajo de los médicos residentes.

Para el líder de los socialistas de Cantabria, «el objetivo del PP es claro, señalar un problema que les sirve como excusa para llevar a cabo las intenciones que manifestó desde el inicio de la legislatura el consejero de Salud», intenciones, continuó, «como ir desmontando la red de consultorios rurales que atienden a la ciudadanía de Cantabria, residan donde residan». Según Zuloaga, «cargan la responsabilidad sobre los ayuntamientos de Cantabria ante un problema que debe ser afrontado con acuerdo, con consenso con los profesionales y la ciudadanía, pero, desde luego, desde el Gobierno de Cantabria».

«Hemos visto cómo han atacado Valdecilla. Hemos visto cómo han cuestionado las inversiones que teníamos en marcha. Hemos visto cómo han paralizado las obras del Hospital de Laredo. O hemos visto cómo han desatendido durante meses Castro Urdiales o tantos otros consultorios de las zonas rurales de Cantabria», enumeró el líder socialista, «y ahora, la solución que ofrece el Partido Popular es contratar taxistas en vez de sanitarios para garantizar la sanidad pública».

El PP, según Zuloaga, plantea algo que «no es una buena solución que, además, tiende a saturar los centros de salud donde se va a concentrar toda la atención sanitaria de Cantabria, en un momento en el que la población en nuestra tierra crece de manera exponencial». Y es que, denuncia el socialista, «al PP se le llena la boca hablando de lucha contra la despoblación en las zonas rurales y las medidas que realmente toman es mandar toreros en vez de mandar sanitarios». «Esto no puede ser», sentenció.