El Racing restituirá el lábaro y las demás banderas de los Campos de Sport

Rectifica así lo que interpreta como un «error» del club, entiende que el jueves se transmitió un mensaje demasiado escueto que lo descartaba y ratifica que la retirada del lábaro -como de otras banderas, caso, por ejemplo, de las de las peñas y LaLiga- se debió a que se decidieron colocar sólo las del club y las oficiales, pero ahora añade que a corto plazo. Tampoco ha tenido el Racing ningún problema de abastecimiento que pudiera justificar hasta ahora el que no se haya restituido la enseña, como confirmaba también este viernes su propio presidente.

Si no lo ha hecho hasta ahora ha sido por una decisión, acota, relacionada con el luto oficial durante el que se decidió que sólo lucieran la del Racing, la española, la cántabra y la de Santander. Es decir, las imprescindibles, y que ahora va a rectificar. En consecuencia, y siempre en palabras de Pérez, el Racing restituirá el lábaro en un plazo máximo de una semana, que es lo que queda para que se reanude LaLiga. «Yo mismo tengo lábaros en casa», insistía este viernes el presidente a El Diario.

Alfredo Pérez también ha querido salir al paso de la relación que se ha establecido entre la exigencia de Cristóbal Palacio, patrono de la Fundación, abogado del club y exconsejero del Racing, de que se retire el lábaro de las instituciones públicas con lo acaecido en los Campos de Sport. «En el consejo del Racing y de Pitma hay gente de todas las sensibilidades políticas, absolutamente de todas, y no quiero que se relacione al Racing con un partido». «Lo que haga una persona -en referencia a Palacio- en su vida personal más allá de nuestras empresas no nos condiciona ni nos incumbe», explicaba ayer el presidente. Trataba así de evitar cualquier ligazón del club con Vox: «Lo que haga un patrono de la Fundación es responsabilidad suya; no se deben pedir explicaciones sobre ello al Racing».

El caso es que el club verdiblanco ha vivido dos días muy convulsos en torno a la decisión de retirar el lábaro y las consecuencias que ha tenido. Ya a última hora del jueves el presidente colocaba el emblema en su perfil en redes. Pero muy poco antes el club había comunicado oficialmente a El Diario que no tenía prevista ninguna acción al respecto.

En lo que achaca a un desajuste interno e insistiendo en que él sí lo tenía previsto, el club descartaba el jueves su reposición, recordaba que se había retirado hacía ya varias semanas y se limitaba a señalar oficialmente y a preguntas de El Diario que todas las banderas «se sustituyeron a lo largo de la temporada porque estaban muy deterioradas» y que después «se colocaron las que se consideró indispensables». De hecho, la misma comunicación oficial del club señalaba que «algunas temporadas se han tenido que cambiar hasta tres veces por su deterioro; por eso se decidió poner sólo las imprescindibles». Es decir: las cuatro que figuraban en la fachada de los Campos de Sport. Sencillamente el lábaro no era «indispensable» y por eso se había retirado.

Finalmente, y después de que el asunto del lábaro concitara toda la actualidad y la atención del club y la Fundación en lo que a lo extradeportivo se refiere, fue el presidente, Alfredo Pérez, quien tomó cartas en el asunto para zanjar la polémica en una decisión tan sencilla como presidencial: se colocará la bandera. Como -insistía ayer- se restituirán las demás (LaLiga, RFEF, peñas y Fundación). En consecuencia, el club mantendrá su estrecha relación con un símbolo con el que está, como su masa social, íntimamente ligado.